Keanu Reeves posee una de las carreras más exitosas de Hollywood. Habiendo protagonizado sagas de renombre como 'Matrix' o 'John Wick' y firmando obras de culto como 'Speed' y 'Constantine', no cabe duda de que se trata de una de las figuras más queridas y populares del mainstream estadounidense. Pero aun teniendo un recorrido de escándalo, el currículum del actor también tiene alguna que otra mancha. A principios de siglo, Joe Charbanic estrenó 'Juego asesino' con James Spader y Marisa Tomei como principales estrellas protagonistas. El cineasta pidió a Reeves, un muy buen amigo suyo, que participase en el proyecto para acabar de cerrar el casting con un papel pequeño, el de David Allen Griffin. El actor aceptó, pero resulta que la importancia del personaje fue mayor de la prometida.
Joe Charbanic, director de 'Juego asesino', engañó a Keanu Reeves para que fuera el antagonista de su ambiciosa película: el protagonista de 'Matrix' quedó muy disgustado
Según recuerda desde Collider, Reeves aceptó participar en 'Juego asesino' porque era buen amigo de Charbanic, y dado que había colaborado juntos con Dogstar, su banda de rock, y el actor ya gozaba de bastante popularidad gracias al estreno de 'Matrix' quiso darle una ayuda a su colega. El artista tenía que meterse en la piel del asesino David Allen Griffin con apariciones menores, cobrando por ello un salario reducido.
Pero resulta que ese personaje acabó siendo el antagonista del proyecto y su participación fue mayor de la prometida. Reeves, que obviamente pensó en denunciar el caso, quedó atado de manos al enterarse de que alguien había falsificado su firma en un contrato de acuerdo y confidencialidad: tenía prohibido hablar del asunto y del desarrollo del filme hasta años más tarde. La película, además, tuvo muy poco éxito, lo que enfadó aun más a Reeves.
Engañado y estafado (puesto que no se subió su salario acorde con la importancia de su personaje y su aumento de horas en rodaje), Reeves quiso enterrar 'Juego asesino' para siempre, pero todavía, aun a día de hoy, sigue siendo recordado como el peor proyecto en el que ha participado. Eso, sin embargo, no ha cambiado para nada a la estrella de Hollywood, puesto que sigue siendo un buenazo y una de las mejores personas del sector.