Disney ha sabido, en los últimos años, diversificar sus éxitos cinematográficos y televisivos a fin de hacer rentables sus grandes inversiones en la sagas de entretenimiento. Sí, todos pensamos en Marvel y su Universo Cinematográfico o en Star Wars y su extensa saga. Sí, estas dos franquicias estrella, parte indispensable de la estrategia de la Casa del Ratón, son las que más dinero generan, no son las más rentables.
Marvel y Star Wars son dos grandes sagas para Disney y generan cantidades ingentes de dinero pero no son las más rentables
Comencemos por lo obvio. En 2009, tras unos años bastante complicados para la Casa de las Ideas, Marvel fue adquirida por Disney por una cantidad enorme para la época: 4000 millones de dólares. En 2012, en un giro inesperado de los acontecimientos, realizaron una jugada similar a nivel estratégico: compararon Lucasfilm por 4050 millones de dólares.
De esta forma, Marvel y sus personajes, así como Star Wars o Indiana Jones, pasaban a ser vecinos de Mickey Mouse y sus amigos. Pisaron el acelerador: más películas, más series y más productos de entretenimiento que llevaron a Star Wars a disfrutar de una nueva trilogía, de series de acción real en Disney+ y de una nueva etapa dorada. Y qué decir de Marvel.
Ahora, en un interesante informe para los accionistas e inversores, Disney ha compartido el impacto de sus grandes sagas y licencias, con un papel predominante de Marvel y Star Wars, pero pese a que generan muchísimo dinero para las arcas de la empresa, se encuentran muy atrás de la rentabilidad que supone la animación de éxito de Disney. Y no estamos exagerando. Marvel ha ofrecido a Disney unos ingresos de 11,6 mil millones de dólares en total, mientras que las ganancias provenientes de Star Wars y el universo desarrollado por Lucasfilm rondan los 13,2 mil millones de dólares. Es una barbaridad, y en estos números entran desde los estrenos en cine, las series de streaming o el marchandising, pero se quedan fuera las atracciones de los parques temáticos.
Es decir, para Disney, y con las cifras en la mano, Marvel habría generado una rentabilidad de 3,3 veces lo que se invirtió en la licencia cuando se adquirió, mientras que Star Wars ha ofrecido 2,9 veces lo pagado al ratón y su ejecutiva. Pero no son las más rentables ni lejos. Para Disney, Frozen y Toy Story son sus licencias o sagas más exitosas, ya que los resultados de taquilla de Frozen, su campaña de merchandising y su presencia en el mercado le suponen a Disney un retorno de 9,9 veces lo invertido en el desarrollo de la propiedad intelectual. Pese a que Buzz Lightyear y Woody de Toy Story se quedan lejos de Frozen, la producción de Pixar ha otorgado un retorno de 5,5 veces más dinero del invertido. Es lógico por tanto que quieran continuar con las historias de ambos universos de animación en el cine.
Estos números no dan una idea aproximada de lo complicado que es sacar dinero de grandes sagas, omnipresentes e importantes en el catálogo de propiedades como Marvel y Star Wars, que si bien recaudan miles de millones de dólares al año, también requieren de un esfuerzo en su inversión y producción, algo que en animación podríamos decir que es más comedido y fácil de rentabilizar.