La Twitter de Elon Musk, que atraviesa problemas con respecto a sus usuarios y los problemas de la verificación de cuentas oficiales, ha inaugurado un nuevo episodio. La red social ha suspendido hoy viernes la cuenta de Kanye West, después de que el rapero estadounidense publicara una imagen donde aparecen una esvástica y una estrella de David entrelazadas. Ha sido Musk, que ayer se reunió con Apple, el que ha confirmado la suspensión del perfil por incitación al odio y la violencia.
Elon Musk confirma la suspensión del perfil de Kanye West, que hace unos días defendió a Hitler
"Solo aclarar que su cuenta fue suspendida por incitación a la violencia", ha especificado Musk en una respuesta al tuit de West. El rapero, que está vez más aislado por sus declaraciones antisemitas y la admiración que ha manifestado por Adolf Hitler en diferentes programas y textos, se cambió de nombre hace unos meses, inaugurando una nueva etapa en su vida. Tras fracasar en sus aspiraciones presidenciales, West llegó a acusar a Quentin Tarantino de robarle ideas para la película Django y se vio envuelto en una serie de polémicas con la cantante Taylor Swift en el pasado y que llevaron a la cantante a apartarse de las redes sociales durante un año. Su historial se ha ido agravando en las últimas semanas una vez ha comenzado a defender los logros del Tercer Reich y la manera en la que Hitler abordó muchos de los problemas de Alemania.
"Hice todo lo posible. A pesar de ello, volvió a violar nuestra regla contra la incitación a la violencia. La cuenta será suspendida", recalcaba Musk, que recuerda que se le devolvió la cuenta de Twitter al cantante hace unos días en la amnistía que había promocionado en la red social.
No obstante, no es la primera vez que la plataforma suspende la cuenta del rapero y empresario, ya que durante el mes de octubre, poco después de que West volviera a Twitter tras dos años de ausencia, volvió a ser suspendido por la reiteración de sus mensajes antisemitas.
West ha apoyado a Hitler en una entrevista publicada a través del blog de extrema derecha Infowars, en la que el cantante negó de forma tajante la existencia del Holocausto e hizo comentarios contra los judíos. En aquel encuentro con el locutor Alex Jones, acusado de promulgar fake news y discursos de odio, West se presentó con un pasamontañas, las manos ataviadas con guantes y una copia de la Biblia. No son pocos los que creen que la celebridad, aplaudida por sus acciones sociales en el pasado, ha comenzado a perder la cabeza y que está en un proceso de delirio realmente preocupante debido a la resonancia de sus acciones y palabras en millones de personas en todo el mundo.
Elon Musk lidia así, tras una semana horrible con pérdidas millonarias y encontronazos por la proliferación de los discursos de odio en la red social, con un nuevo capítulo en la larga y problemática travesía empresarial en la que se ha sumido tras la compra de Twitter.
