El mundo de la piratería está a la orden del día en cualquier forma de arte. Si nos centramos en el mundo del cine, no son pocos los que intentan tomar las imágenes proyectadas en una sala con su teléfono móvil o cámara para posteriormente subirlas a plataformas de Internet y obtener beneficios. Sin embargo, hay algunas personas que no consiguen cumplir su propósito, tal y como ha ocurrido con un hombre de cincuenta años en una sala de cine de Osaka, Japón.
El hombre grabó la película de Detective Conan para volver a verla en su casa
El hombre en cuestión asistió a una proyección de la cinta de anime Detective Conan: La bala escarlata en su estreno en Japón el pasado abril. El individuo fue arrestado por las autoridades porque trató de grabar la película entera con su teléfono móvil, según ha reportado el medio MBS News. El hombre arrestado trabaja en la oficina de impuestos de Ashiya, una ciudad japonesa que es considerada como una de las áreas más caras de la región de Kansai. La violación de la Ley de derechos de autor japonesa castiga con mano dura y el hombre ha confesado que, debido a que la película era interesante, la filmó de escondidas para volver a verla en la comodidad de su casa.
En Japón, al igual que en otros territorios, se proyectan algunos anuncios previos a las proyecciones de las películas para advertir a la audiencia de que no se pueden grabar las imágenes. En el caso de Japón, los anuncios son bastante divertidos, pero las infracciones de derechos de autor se castigan con severidad ya que es un tema que se toman muy en serio. De hecho, el anuncio que podéis ver unas cuantas líneas más arriba indica que las sanciones son diversas, pero igual de contundentes; la grabación de películas en una sala puede resultar en una pena de hasta diez años de cárcel y fuertes multas.
