Hablando con la web Eurogamer, Peter Molyneux, conocido por dar vida a la saga Fable, se ha sincerado, y ha asumido como propia la culpa en las carencias que tiene Fable III.
Molyneux afirma que "es un fallo personal", ya que no fue capaz de convencer a Microsoft para que les permitiesen trabajar durante más tiempo en el tercer episodio de la serie. "Es única y exclusivamente mi culpa. Fui yo el que no fue lo suficientemente claro al respecto", reconoce.
"Es muy difícil que una editora entienda por qué necesitas más tiempo, ya que más tiempo implica más dinero, pero tampoco quieren que tu producto sea un fracaso. Explicarlo y aclararlo es la responsabilidad del director que está a cargo de los desarrolladores, es decir, yo", se lamenta.
Ahora, tras la marcha de Microsoft, Peter Molyneux se encuentra inmerso en la creación de un juego con su nuevo estudio 22 Cans, del que espera hablar en los próximos meses.