No es una película, es un videojuego. No es una simple aventura gráfica, sino un viaje emocional. David Cage, director y guionista de Heavy Rain, no se cansa de repetir su mensaje durante la presentación de Heavy Rain en Madrid. Lo que Quantic Dream ha intentado hacer es elaborar un lenguaje propio de los videojuegos abriendo nuevos caminos. Para conseguirlo, utiliza una jugabilidad basada en una interacción poco habitual con el mando de PS3 y una profundidad casi abisal en el desarrollo de los personajes y el mundo de juego.
"Ha llegado la hora de que los videojuegos decidan si quieren ser arte", dice Cage durante la presentación, y propone que sean algo más que un entretenimiento basado en saltar plataformas o disparar. Heavy Rain es "un juego para gente que no quiere zombis ni aliens. Es un juego para adultos. Cuando eres mayor quieres otras cosas, no sólo rescatar princesas o matar dragones", añade, y eso supone abrir un camino hasta ahora inexplorado.
Esa innovación llega de la mano del corazón. En última instancia, la intención de Cage es lograr que el jugador empatice con el personaje de tal modo que cuando en la pantalla vibre el indicador del movimiento que debes realizarr (indicativo de que el personaje está nervioso), tú, como jugador, te sientas impelido a hacerlo en el momento exacto para poder salvarlo. Cage lo demuestra cuando en pantalla la vida de la insomne Madison Page corre peligro. El director del juego mueve las manos con el mando con viveza mientras la anima (o se anima a sí mismo): "¡Venga, corre, corre, vamos!". Consigue poner en tensión a casi todo el público.
Para llegar a esa implicación Quantic Dreams ha utilizado recursos variados. Por poner un par de ejemplos, un apartamento en el que se han diseñado hasta detalles que luego no se ven en el juego con la intención de conseguir que parezca que alguien vive allí, o implicar al jugador en movimientos muy cotidianos del personaje como ducharse o afeitarse.
Cada uno de los cuatro personajes protagonistas tiene una jugabilidad nueva y diferente, pero todos tienen en común su vulnerabilidad: así, Madison Page es una insomne que despierta siempre a las tres menos diez con terribles pesadillas, el detective Scott Shelby, el típico detective desencantado de novela negra pero con un fondo tierno, sufre un asma que lo paraliza hasta que usa su medicación.
Cage muestra orgulloso otro de los pilares del juego. "Queríamos que el personaje fuer el actor real: la voz, los movimientos, la actuación, su manera de moverse, que fuese todo el personaje". Por eso realizaron un casting completo y se han capturado después sus movimientos y expresiones durante 172 días de rodaje para conseguir el máximo realismo, con 30.000 animaciones únicas.
Lo que consigue dar el interés a estos elementos y aglutinarlos con coherencia es la historia que varía con todas las decisiones que tomas, y que consigue que vivas una experiencia de juego diferente cada vez que juegues al título. Cage informa de que hasta los cuatro personajes jugables pueden morir en algún momento de la historia y no por eso termina el juego, porque este suceso se incorpora a la trama.
La actriz Michelle Jenner (Los hombres de Paco, Spanish Movie) ha puesto la voz a uno de los personajes del juego y en la presentación del título se muestra impresionada por el realismo gráfico de Heavy Rain, aunque reconoce que doblar un videojuego le supone un esfuerzo extra respecto a una película.
Heavy Rain, diseñado por Quantic Dream y producido por Sony, estará a la venta el 25 de febrero para PlayStation 3.
