El pasado jueves The Last of Us Parte II Remasterizado debutó en PC, la espectacular aventura de acción de Naughty Dog lanzada originalmente en 2020, que llega con las mejoras visuales y nuevos modos de juego del remaster lanzado para PS5 el año pasado.
Como podemos en Steam, el juego cuenta con reseñas "muy positivas", con un 88 % de críticas positivas, lo que indica que este port de PC ha salido bastante bien. En cualquier caso, han descubierto un par de trucos que pueden mejorar mucho su rendimiento.
Cómo mejorar el rendimiento de The Last of Us Parte II Remasterizado en PC
Por alguna razón, el juego presenta un rendimiento muy pobre en tarjetas gráficas NVIDIA cuando Rebar está activado. Aunque este ajuste suele estar desactivado por defecto a nivel de driver, y parece que actualmente está funcionando de forma incorrecta.
La solución consiste en entrar en la BIOS y desactivar Rebar manualmente. Tras hacerlo, se obtiene una mejora de rendimiento considerable. Esto fue demostrado por NXGamer en su último vídeo, y también ha sido verificado por otros usuarios. Resizable BAR es una tecnología que permite a la CPU acceder a la memoria de la GPU (VRAM) de forma más eficiente. En lugar de acceder a pequeños bloques de memoria de manera limitada, con Rebar activado la CPU puede acceder a toda la VRAM disponible de una vez.
El inconveniente es que Rebar puede ser útil en otros títulos, por lo que tener que desactivarlo solo para este juego es un problema. Por ello, sería deseable que Nixxes e Iron Galaxy solucionen este comportamiento, o que NVIDIA lo desactive específicamente para este título desde su controlador. Otro problema detectado por NXGamer es que el juego puede funcionar peor si se bajan las opciones gráficas sin reiniciar el juego, aunque no todos los usuarios lo han experimentado.
Lanzado originalmente para PS4 en 2020, esta versión mejorada llegó a PS5 el año pasado, y nos permite disfrutar de la mejor versión de un juego inolvidable, protagonizado por Ellie y Abby. La versión para PC no solo incluye el contenido original y el nuevo modo de supervivencia "Sin retorno", un desafiante roguelike, sino que también incorpora una serie de mejoras gráficas y de rendimiento especialmente diseñadas para ordenadores.
Entre sus principales características se encuentra la compatibilidad con tecnologías avanzadas de escalado y generación de fotogramas, como NVIDIA DLSS 3, AMD FSR 3.1 e Intel XeSS. Además, aprovecha DirectStorage, reduce los tiempos de carga y permite una experiencia más inmersiva con pantallas panorámicas, ultrapanorámicas y soporte para HDR.
Para quienes prefieren jugar con mando, hay soporte total para el DualSense de PlayStation 5, con gatillos adaptativos y vibración háptica, así como compatibilidad con otros mandos personalizables, y también incluye una configuración flexible para teclado y ratón.
