Final Fantasy VII se basó en la película Tiburón para presentar al personaje de Sefirot. La similitud más clara por ser ambos un ente poderoso del que se habla, pero al que apenas se ve hasta el final, lo cual genera un halo de misterio. Para Remake, como todo el mundo le conocía ya, usaron otro enfoque.
Así lo afirmó Yoshinori Kitase, productor del proyecto actual de remakes, durante una entrevista con el blog de Square Enix en abril de 2020. Le dieron más protagonismo a Sefirot para dejar clara su importancia desde la primera entrega de esta recreación. Teniendo en cuenta que tanto Remake como ahora Rebirth cuentan con diferencias respecto al original y que han pasado más de 25 años entre unos y otros, tiene sentido que las influencias del equipo creativo hayan variado.
Este es el clásico de Disney que ha inspirado al director de Final Fantasy VII Rebirth
En este sentido, Naoki Hamaguchi, director del juego, cuenta a Vandal y El Español en una entrevista en Londres cuál ha sido su nueva obra de referencia. Se trata, sorprendentemente, de La bella y la bestia. Según cuenta, se fijaron mucho en los cambios de la adaptación a personajes reales desde la cinta de dibujos que lanzó Disney en 2017.
Según cuenta, llevaban entre tres y seis meses desde que se unió al equipo que empezó a trabajar en la serie conocida como remake. Fue al cine a ver esa película y algo cambió en el desarrollo. Estaban planteando el proyecto y preguntando cómo "abordar" la duda de cuánto podían "variar y diferir respecto a lo que se muestra en el original" y la nueva "interpretación". Por aquel entonces, tenían "la idea de poder jugar el juego con la misma calidad de gráficos que tenía Advent Children, la película". Era un "objetivo ambicioso".
Para Hamaguchi esa sesión de cine fue clave: "No sabíamos muy bien cuánto necesitamos cambiar ni cuánto necesitamos mantener igual. Entonces, mientras me preguntaba sobre eso y el mejor enfoque, vi La bella y la bestia. Y me impresionó mucho porque trataba de hacer algo muy similar a lo que estábamos desarrollando. La idea era la misma, reinventar e intentar tomar una animación de estilo antiguo y trabajarla en un estilo mucho más realista".
Al creativo le "impresionó mucho el hecho de que en realidad no habían cambiado tanto". A su parecer, "la trama era exactamente la misma, los personajes eran los mismos y básicamente tenían los mismos diseños, pero se mostraban con mucho más detalle". Entonces vio que eso estaba "bien" y que era "muy interesante" porque no tenían que hacer "grandes cambios" y que el hecho de rehacerlo ya lo haría diferente de por sí.
Afirma que lo único que tenían que hacer es "ser muy respetuosos y leales con el trabajo original, pero añadiendo ese nivel extra de detalle". Ir a aquello que no se pudo lograr en el original. Hamaguchi menciona que la película de dibujos y el juego de la primera PlayStation salieron en fechas no demasiado lejanas: una se lanzó en 1991 y otra en 1997. Las nuevas versiones, por su parte, salieron con tres años de diferencia: en 2017 y 2020. Así que les sirvió de espejo donde mirarse. "Fue una gran pista y una gran ayuda", sentencia.
En nuestras impresiones de Final Fantasy VII Rebirth os contamos qué nos han parecido las tres primeras horas del juego en un evento en Londres al que acudió Vandal.
