Lejos de remontar, el empleo en la industria del videojuego parece ir en picado. Esta semana se han conocidos despidos en dos estudios: People can Fly, donde se quedan sin trabajo más de 30 personas, y Black Forest Games, que sufre las consecuencias de la crisis de Embracer y despide a la mitad de su plantilla.
El equipo de un juego sin anunciar
Los despidos en el estudio polaco People can Fly, según afirma la web Kotaku, afectan al equipo que estaba trabajando en un juego aún no anunciado de nombre clave Project Gemini publicado por Square Enix con lanzamiento previsto para 2026. Al parecer el juego sigue adelante no se sabe si se mantiene esa fecha y tendría un tamaño más pequeño y algunos recortes respecto a lo previsto inicialmente. Otras 20 personas que también trabajaban en ese proyecto se integrarán en otros trabajos del estudio.
Black Forest Games, 50 personas despedidas
Black Forest Games, autor de varios Destroy All Humans! los últimos años, ha despedido a unas 50 personas, la mitad de la plantilla. El estudio se creó en 2012 con buena parte de los extrabajadores de Spellbound Entertainment después de que este último estudio quebrase.
Black Forest Games está trabajando actualmente en Teenage Mutant Ninja Turtles: The Last Ronin. Según Kotaku, la mayoría de los jefes del estudio conserva su puesto.
En 2017 lo compró THQ Nordic, parte de Embracer Group, un gigante nórdico de los videojuegos que ha despedido desde el año pasado a más de mil personas en distintas empresas y cancelado 15 proyectos, la mayor parte sin anunciar.
