La compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft está acaparando la atención de los titulares en estos últimos días, y no es para menos si tenemos en cuenta que compañías como Sony PlayStation y la propia Microsoft han lanzado comentarios a la Agencia Reguladora de Competencia de Reino Unido (CMA) que no han pasado nada desapercibidos por su contundencia. Sin embargo, no ha sido hasta después de toda esta vorágine de comentarios que una representante de Activision Blizzard ha decidido pronunciarse públicamente sobre esta compra.
We're committed to continuing to work cooperatively with regulators around the globe to allow the transaction to proceed, but won't hesitate to fight to defend the transaction if that's needed.— Lulu Cheng Meservey (@lulumeservey) November 24, 2022
Lulu Cheng, vicepresidenta ejecutiva de asuntos corporativos y CCO de Activision Blizzard, ha expresado a través del comunicado que podéis encontrar justo encima de estas líneas que la compañía hará todo lo que esté en su poder para que la adquisición se complete con el menor número posible de inconvenientes. "Estoy viendo muchas especulaciones sobre la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft. Cualquier sugerencia de que la transacción podría tener efectos anticompetitivos es absurda", dice de manera tajante en el tweet.
"Esta fusión beneficiará a los jugadores y a la industria estadounidense del juego, especialmente cuando nos enfrentamos a una competencia más dura del extranjero", continúa. "Nos comprometemos a seguir trabajando de forma cooperativa con los reguladores de todo el mundo para permitir que la transacción siga adelante, pero no dudaremos en luchar para defender la transacción si es necesario", concluye en sus declaraciones.
La FTC se inclinaría por bloquear la compra
Las declaraciones de Cheng han surgido poco tiempo después de unos comentarios por parte de la FTC (Federal Trade Commission o Comisión Federal de Comercio), que estaría pensando en presentar una demanda antimonopolio para bloquear la compra de Activision Blizzard por Microsoft debido a que sienten que podría otorgar a Microsoft un impulso "injusto" en el mercado que impediría a las demás compañías poder competir.
