La situación en la que se ha publicado Half-Life: Alyx no podía ser más idónea para levantar conjeturas acerca de la línea que separa la realidad virtual de la realidad a secas; hace unos días el propio Gabe Newell decía que Matrix está mucho más cerca de lo que pensamos y hoy mismo un profesor de Estados Unidos ha demostrado que en tiempos de aislamiento social, la VR puede suponer una gran vía de conexión entre humanos.
Una clase completa en la ventana de Half-Life: Alyx
Resulta que este profesor de San Diego ha aprovechado la enorme interactividad que Half-Life: Alyx permite con los objetos de su universo para dar clases a sus alumnos mientras dura la reclusión domiciliaria a causa de la crisis por el coronavirus. ¿Cómo? Pues yendo hasta un punto del juego en el que se pueden coger rotuladores de colores para dibujar a voluntad en un vidrio: donde la mayoría de jugadores han creado sus particulares obras de arte, este docente ha visto una herramienta extraordinaria con la que atraer la atención de su alumnado hacia su lección magistral.
En el vídeo publicado por el profesor podemos ver cómo imparte una clase completa sobre ángulos en este momento concreto de los primeros compases de Half-Life: Alyx, sacando partido a las herramientas de las que dispone dentro del juego: unos cuantos rotuladores, un vidrio y un borrador. Según explica el profesor en la descripción del vídeo, el motivo detrás de utilizar Half-Life: Alyx como herramienta docente no se debe tanto a la innovación dentro del marco educativo, que podría servir también para despertar la curiosidad de los alumnos, sino porque le tocaba dar clases online durante el aislamiento coincidiendo con el lanzamiento de Half-Life: Alyx y, claro, no quería perder tiempo de juego.
Con este nuevo vídeo se pone también de manifiesto una de las bondades de Half-Life: Alyx más aclamadas por la crítica: su inmersión con el universo. El detallismo tecnológico de este juego exclusivo de realidad virtual es tal que incluso permite impartir una clase usando rotuladores, sin que eso suponga una dificultad en la lectura de la lección, tanto de los gráficos como de la caligrafía, y pese a que no sea un videojuego diseñado para ello.
Half-Life: Alyx se ha convertido prácticamente sin quererlo en una herramienta educativa que ayuda a salvar la distancia social durante el aislamiento por coronavirus, pero otros videojuegos buscan cumplir esta función de una forma un poco más proactiva: es el caso de Minecraft, el famosísimo juego de construcción y supervivencia que Xbox utilizará, tal y como anunció ayer, durante este aislamiento como herramienta educativa gratuita ofreciendo paquetes mentorizados con diferentes experiencias docentes.
