Amro Elansari es un streamer estadounidense del MMO online Runescape desarrollado por Jagex. Elansari fue silenciado entre marzo y abril de 2019, es decir, no podía escribir mensajes en el chat para comunicarse con otros jugadores, una penalización impuesta por los desarrolladores habitualmente al actuar de manera tóxica en este tipo de juegos. El jugador intentó restaurar las funcionalidades de su cuenta a través de la web del título, pero Jagex no le dio la razón. Por ello, Elansari puso una demanda (escrita a mano; vía VICE) donde asegura que la compañía violó sus derechos de libertad de expresión y lo discriminó. El Tribunal Federal de Pensilvania no le ha dado la razón.
Mark Kearney, el juez del distrito que atendió el caso de Elansari, explica en su escrito que hacer demandas constitucionales por ser silenciado en un videojuego online es "improbable". "La Primera Enmienda y sus garantías constitucionales de libertad de expresión se restringe a actores gubernamentales, no entidades privadas", apunta Kearney (vía PC Gamer).
El jugador también se quejó de que no tuvo un juicio justo por parte de Jagex e interpuso una demanda por ello, algo que el juez también rechaza. "El Proceso Justo de la Quinta Enmienda se aplica solo al Gobierno Federal y no a personas privadas, y no actúa contra una compañía privada". El Tribunal de Apelaciones del Tercer Distrito (localizado en Filadelfia) ya le quitó la razón a Elansari a este respecto a principios de enero: "la acción del Estado es un prerequisito para poner una demanda sobre la Decimocuarta Enmienda [incluye la Cláusula del Debido Proceso y la Cláusula sobre protección igualitaria], y Elansari no ha indicado alegaciones sobre que alguno de los acusados sea un actor del Estado".
El mismo Tribunal aseguraba que la demanda sobre la discriminación de Elansari no se sostiene. El jugador asegura que la discriminación se daba en el hecho de que él estaba silenciado cuando el resto de jugadores no estaban silenciados. El Tribunal explica que la Ley de Derechos Civiles de 1964 impide la discriminación basada en la "raza, color, religión o nacionalidad", algo que no se da en el caso de Elansari.
El streamer demandó hasta a Tinder
Desde el medio Pennlive muestran que esta no es la primera demanda que ha puesto Elansari. En el último año y medio ha acudido al Tribunal del Distrito del Este de Estados Unidos en diez ocasiones (cuatro de ellas en julio de 2019 para poner demandas a Jagex). También intentó poner una acción judicial colectiva contra Tinder, algo que solo puede hacer un abogado. Esta última demanda se basaba en un supuesto "timo" por parte de la aplicación, con la argumentación de que el programa envía notificaciones avisando de que has gustado a cierto número de personas, para después pedirte una suscripción si quieres ver qué personas son.
