DICE, el equipo creativo y desarrollador detrás de videojuegos como Star Wars: Battlefront (2015, 2017), Mirror's Edge o la saga Battlefield, tiene una importancia capital dentro del seno de EA. La compañía no solo se nutre de sus grandes videojuegos o sagas, también se dieron cuenta del potencial del engine Frostbite, un motor muy potente que da vida a casi todos los títulos de la editora y que aunque también genera quebraderos de cabeza, tiene en Project Atlas el siguiente gran paso en su mejora. ¿Cómo? Mejorando la tecnología detrás de su sistema de destrucción gracias a este ambicioso proyecto de EA en la nube.
El poder de la nube
"Estoy muy entusiasmado con todo lo relacionado con el streaming, pero en realidad es simplemente un paso más en este viaje.
La principal diferencia en la nube no es realmente que la CPU esté ubicada en un gran edificio lejano en lugar de estar en su sala de estar; La principal diferencia es que ahora puedes tener docenas, cientos, miles o millones de computadoras que pueden hacer cosas para ayudar a potenciar el juego", comentaba Ken Moss, jefe de tecnología de EA, a GamesIndustry.biz, en una entrevista en la que fijaba los objetivos de su plataforma.
"Si aplicas eso a un juego actual como Battlefield... Lo cierto es que DICE se enorgullece de su increíble sistema de destrucción. Explotan todo lo que hay en pantalla mejor que nadie. Pero las simulaciones que hacen para la destrucción son muy limitadas en comparación con lo que realmente les gustaría hacer, porque tienen una cierta cantidad de GPU y una cierta cantidad de CPU y tienen que hacerlo en tiempo real", matiza. "Pero si pudieran tener un enorme conjunto de servidores allá arriba que puedan ejecutar nuestro motor de física en Frostbite y calcular una mejor destrucción, puede ser como en la vida real. Y puede aplicar eso no solo para hacer estallar las cosas. Puedes llevarlo a cada parte del juego que se te ocurra", concluía el ejecutivo. ¿Lo veremos en el próximo Battlefield de 2022, que se espera para las consolas como Project Scarlett y PlayStation 5?
Project Atlas, que no tendrá que ver demasiado con xCloud o PS Now en el ámbito del juego en streaming bajo demanda, parece que irá en la línea de las declaraciones que Microsoft hizo con Xbox One en el 2013 y el poder de la nube, un aspecto que argumentó que cambiaría el cálculo remoto de los videojuegos y fue objeto de polémica y memes, pero que según Redmond acabaría ofreciéndole al jugador mejores aspectos en sus gráficos, la simulación de físicas o incluso la resolución. Google Stadia, el servicio de la nube de Google, también hará gala de esta red computacional para potenciar sus videojuegos. Según los expertos, será el verdadero salto adelante adelante en la tecnología de la nube.