Las similitudes entre Quantum Break y Control han acompañado al nuevo proyecto de Remedy Entertainment desde su anuncio: ambos son juegos de acción en tercera persona con elementos paranormales. Pero para Remedy, hay una diferencia importante: Quantum Break era una apuesta "segura" mientras que con Control han podido probar ideas más locas.
El director del juego, Mikael Kasurinen, ha comentado a Eurogamer que "seamos honestos, no somos uno de los enormes estudios que hay por el mundo, pero seguimos siendo independientes. Esta es nuestra licencia, decidimos que hacer con ella. Lo más inteligente para nosotros es trabajar en lo que creemos, estar preparados para ser un poco locos, incluso polémicos".
"Con Quantum Break hablamos de querer ser, a falta de una mejor palabra, mainstream -atraer al mayor número de jugadores-. Seleccionamos las cosas con cuidado y quizás en ocasiones evitamos otras que adoramos.
Estábamos ansiosos por ser 'extraños'. Jugamos a lo seguro con Quantum Break en muchos sentidos. Después de aquello sentíamos que queríamos ser diferentes".
"Puedes mirar atrás a Quantum Break y decir que puede que sea lo más lejos que hemos llegado en narrativa. Hay serie de televisión de imagen real, complicadas cinemáticas, un elaborado sistema de animación facial. Es tan lejos como podemos ir en cuanto a narrativa desde un punto de vista visual". Control en cambio quiere ampliar la experiencia de Remedy en la jugabilidad, su complejo universo y la experiencia abierta.
Control se lanza el 27 de agosto en PC, PlayStation 4 y Xbox One. Ayer se anunciaron las diferentes ediciones del juego y su contenido descargable. Podéis conocer más con nuestro último avance.