Phil Spencer, máximo responsable de la división Xbox, ha ofrecido varios titulares a lo largo de la semana. Hace unas horas conocíamos más de la estrategia de compra de estudios por parte de Microsoft y hace escasos días, detallaba su visión sobre el hardware y las consolas. Ahora, en una extensa entrevista, reconoce los errores cometidos con el diseño en términos de rendimiento de la primera versión de Xbox One y su sobreprecio con respecto a PlayStation 4.
Una consola menos potente y más cara: un modelo erróneo
"Lanzamos al mercado una consola que era menos potente que PlayStation 4", afirmaba Phil Spencer. One se lanzó en 2013 por 499 euros en una versión que incluía Kinect, parte del ecosistema de por aquel entonces, y bajo la dirección y supervisión de Don Mattrick, gerente de la división en aquellos días. Su competencia lanzó PS4 a 399 euros y ofreciendo un hardware superior. "Sabíamos que teníamos un problema, pues era demasiado cara al incluir una unidad de Kinect en cada pack de la consola. Teníamos una consola demasiado cara y menos potente que PlayStation 4... Estaba claro que no era el modelo correcto para nosotros", reconocía Spencer.
"Y luego está el error de haber lanzado nuestras franquicias con excesiva frecuencia, algo que nos ha hecho perder el interés y la expectación entre nuestros aficionados. Y eso es algo vital en la industria del entretenimiento. Nuestros estudios han perdido grandes líderes, y nuestros estudios acabaron teniendo más renombre que funciones reales", admitía.
"El mayor desafío al que nos enfrentamos es que el deseo de los jugadores continúa dividiendo nuestra industria. Existe una mentalidad que dictamina que alguien debe fracasar para que otro triunfe, y lo que tenemos que hacer es conseguir que esta industria siga creciendo, sin tomar decisiones arbitrarias sobre qué consola comprar o a qué red unirse. Conforme mayor sea el esfuerzo en trabajar juntos como industria, mejores cosas sucederán en el mundo de los videojuegos", añadía Spencer.
"Tenemos Android y tenemos iPhone, y podemos hacernos llamadas entre nosotros, ¿no? Pues esa es mi esperanza. Que sigamos compitiendo, pero únicamente a nivel de creatividad y calidad" concluía.