La presencia de tramposos en la modalidad multijugador es un problema a la hora de disfrutar de la experiencia que ofrecen este tipo de juegos. Según la encuesta realizada por la firma de seguridad Irdeto, recientemente adquirida por Denuvo, el 60% de los jugadores se ha visto afectado negativamente por estas prácticas.
Para realizar la encuesta, Irdeto se ha basado en los datos recogidos del 27 de febrero al 14 de marzo, con la participación de 9.436 adultos provenientes de China, Alemania, Japón, Corea del Sur, Reino Unido y Estados Unidos. El 60% afirma haber sufrido las trampas realizadas por otros jugadores, mientras que sólo el 12% indica que nunca han experimentado este tipo de situaciones.
El estudio también arroja un dato que resulta preocupante para los estudios de desarrollo. El 77% de los encuestados indicó que "probablemente" dejarían de jugar a ciertos títulos multijugador de saber que otros usuarios hacen trampas.
Por otro lado, el 48% afirmó que renunciarían a realizar compras adicionales en dichos juegos si supieran que otros jugadores están haciendo trampas para ganar de manera injusta.
"Estos resultados indican claramente que hacer trampa en los juegos multijugador es un problema que está aumentando", indicó Reinhard Blaukovitsch, director general de Denuvo en Irdeto. "La naturaleza global de estos juegos implica que no importa dónde esté teniendo lugar la trampa, ya que tiene el potencial de afectar negativamente a otros jugadores en todo el mundo, y esto plantea un gran desafío para los editores de juegos".
Por su parte, Elmar Fischer, director de ventas de Denuvo en Irdeto, agregó: "Si permitimos que los tramposos campen a sus anchas, el impacto en otros jugadores puede llevar posteriormente a una disminución de los ingresos y a un menor tráfico en los juegos".
Rory O'Connor, vicepresidente sénior de Cybersecurity Services en Irdeto, concluyó: "Los jugadores de todo el mundo sienten que no están lo suficientemente protegidos contra las trampas y otros complementos maliciosos. Esto lleva a un círculo vicioso en el que uno de cada ocho jugadores se siente forzado a hacer trampa".
Mientras tanto, no cesan las detenciones a aquellos usuarios que, en juegos como Playerunknown's Battlegrounds, estén vinculados con software de trampas.