Counter-Strike: Global Offensive y sus skins vuelven a ser objeto de la actualidad del videojuego. Si en esta ocasión, no tiene que ver con las apuestas fraudulentas, lo cierto es que la noticia es igual de impactante: el pasado lunes se vendió un skin para rifle francotirador de Counter-Strike: Global Offensive por 61 052,63 dólares en el sitio de compraventa OPSkins, según nos confirma Vandal Sports.
Una de las transacciones digitales públicas más caras
La cifra es tan impresionante, que se trataría de una de las transacciones públicas más caras de las que se tienen registro en el mundo de los videojuegos, y en concreto, del título de Valve. Si bien los números son altos, y marean teniendo en cuenta de que hablamos de un aspecto digital para un arma virtual, no es una apariencia normal. Se trata de un rifle que tiene una una firma de Tyler "Skadoodle" Latham, uno de los mejores jugadores de CS: GO de los últimos años, con una bonita leyenda detrás.
Su equipo, Cloud9, se había convertido en el primer grupo estadounidense en ganar un evento de CS:GO patrocinado por Valve, la ELeague Major: Boston. Los fans de los eSports consideran que esa partida fue uno de los grandes momentos del deporte electrónico, de ahí el valor inmaterial de este objeto que, paradójicamente, no existe.
Llamado Dragon Lore, es el objeto más raro de unas cajas de botín llamadas Cobblestone Packages, que tienen un precio estimado de 31 dólares en el mercado, y que únicamente salen y están disponibles en eventos especiales. Este skin, obtenido durante Krakow Major, tiene la firma del citado jugador, subiendo su valor de forma exponencial. A esto, también hay que sumarle la tirada limitada de estos rifles, de los cuales existen muy pocos en todo el mundo.
"Sólo me lo quitarán de mis manos pixeladas y muertas"
Este rifle también tiene una particular historia detrás. Obtenido en el citado sitio de compraventa de skins, el rifle antes habría estado en posesión de Drone, un jugador que habría comprado el skin previamente a otro usuario por 35 000 dólares. Antes de deshacerse del rifle, habría acordado el precio con el otro usuario pues "era el único precio que estaba dispuesto a aceptar; de otra forma me lo habría quedado", comentaba. Sin embargo, no ha querido obtener más rédito comercial de la cuenta. "No estoy aquí para obtener beneficios ni hacer dinero con el juego, pues no tengo problemas financieros", añadía.