Diablo 4 vs Diablo 3: Principales novedades y diferencias

La espera ha llegado a su fin. Después de muchos años, hoy 6 de junio de 2023, Blizzard estrena mundialmente Diablo 4 en PC y consolas. El regreso a las tierras infestadas de demonios de Santuario era algo que muchos aficionados esperaban ansiosos desde su anuncio, y no es para menos, pues la nueva entrega principal de la saga Action-RPG viene para demostrar que puede mejorar a su predecesor.

Después de Diablo 3, para muchos un juego que no logró estar a la altura de esta legendaria franquicia, Blizzard tenía el reto de colmar las expectativas de la comunidad con este Diablo 4. ¿Lo habrá conseguido? Por nuestra parte, como os contamos en el análisis del juego, Diablo 4 es un gran regreso a las raíces de la saga que esgrime muchas buenas cualidades. Si queréis poneros al día rápidamente sobre las bondades de esta entrega, aquí os resumimos las principales novedades y diferencias que trae a la palestra de juego.

Una historia más oscura y madura

Los amantes del universo narrativo de la saga Diablo están de enhorabuena si lo que buscan en Diablo 4 es una buena historia. Esta entrega vuelve a rescatar las pinceladas de oscuridad y madurez que tenían los primeros juegos, en especial el primero, y va un paso más allá mostrando una capacidad reflexiva y trágica como en ninguna entrega anterior. Muchos sentían que Diablo 3 había sido decepcionante en este sentido, pero la historia de Diablo 4 se sigue con interés, alberga algún que otro giro de guion y cuenta con momentos violentos que reflejan a la perfección lo que es el mundo de Santuario.

No estamos hablando de ninguna obra maestra en el sentido más estricto de esa definición, pero estamos seguros de que la trama, los personajes y la carga dramática de Diablo 4 agradará a los fans más veteranos de la franquicia, al igual que Lilith, una villana malévola y convincente que nos da una excusa para abrirnos paso ante las huestes de demonios.

Mayor versatilidad jugable

Diablo 4 aún se parece en muchos sentidos a Diablo 3, pero en el plano jugable algo que cambia radicalmente es la manera en la que afrontamos los combates y las mejoras del árbol de habilidades. ¿A qué nos referimos con esto? Pues a que esta entrega aporta un árbol de habilidades muchísimo más rico y variado que permite una versatilidad inmensa con respecto a la entrega predecesora.

• En Diablo 4 no todo es centrarse en hacer el mayor daño posible, hay que valorar los puntos que decidimos invertir en el árbol de habilidad para obtener poderes activos, modificaciones, potenciadores y pasivas que se combinen bien entre sí.
• El árbol de habilidades presenta un equilibrio perfecto entre complejidad y opciones de personalización.
• Cada clase de personaje también cuenta con poderes únicos que ofrecen una experiencia de combate bien diferenciada entre cada uno.
• Tras llegar al nivel 50 los personajes desbloquean el panel de Leyenda, una suerte de segundo árbol de progresión que nos permite activar todo tipo de glifos cada vez que subimos de nivel para seguir mejorando a nuestro personaje casi hasta el infinito.

Todo esto influye, y mucho, en la manera en que abordamos los combates. Muchas veces hay que pensar cómo enfocamos un enfrentamiento y buscar maneras de lidiar con los rivales sin perecer por el camino. Sobre todo en las dificultades de mundo más altas, algo que los veteranos sentirán como un reto.

Mientras que en Diablo 3 la sensación de juego era demoledora, rápida y con un ritmo convulso, Diablo 4 se trata en menor sentido de luchar a lo loco contra las hordas de enemigos que nos encontremos, especialmente al pelar contra jefes, enemigos élite y jefes mundiales. Más bien, esta entrega quiere que sepamos administrar nuestros recursos en cada momento y aprovechar los medios a nuestra disposición para sobrevivir.

Un mundo abierto gigantesco

Siguiendo con la jugabilidad, una de las cosas que más destaca en Diablo 4 es la presencia de su enorme mundo abierto. Esta entrega fomenta mucho más la exploración y el perderse que lo visto en Diablo 2 e incluso Diablo 3. El mundo está a nuestra disposición desde el principio con 5 grandes regiones que se diferencian por sus climas y escenarios, y hasta podemos llevar a cabo las misiones de la campaña en el orden que prefiramos durante los primeros actos.

Santuario se siente más grande que nunca, la escala del juego en general cobra una dimensión mucho mayor. La geografía y diseño de escenarios siguen una lógica que da gusto recorrer, con áreas interconectadas y decenas de caminos para ir revelando en nuestro mapa poco a poco. Y para demostrar la ingente cantidad de contenido, también tenemos montones de actividades secundarias con las que entretenernos mientras exploramos. Definitivamente, el salto al mundo abierto le queda como anillo al dedo a la saga. Pero los jugadores que echen de menos las clásicas mazmorras no tienen de qué preocuparse, porque hay cientos para descubrir.

Multijugador permanente y mundo compartido

Otro aspecto de Diablo 4 que trastoca los pilares de la saga es la presencia constante de su mundo multijugador. Si bien en Diablo 3 esto ya era así y, una vez más este nuevo juego requiere conexión constante online, al menos encuentra muchos motivos para ello. Ah, ojo al dato, que en consolas necesitarás una suscripción activa a Plus o Live para poder jugar.

Diablo 4 aún puede disfrutarse en solitario por completo, pero se nota que los diseñadores han desarrollado la experiencia pensando en formar grupos, clanes y alianzas. El mundo de Santuario en este juego es totalmente compartido y se acerca mucho a lo visto en el género de los MMORPG. Te cruzarás con otros jugadores explorando y podrás comerciar con ellos en las ciudades o formar clanes y grupos de hasta cuatro integrantes. También vas a poder participar en mazmorras, eventos y fuertes en compañía de otros usuarios, y por supuesto completar todas las misiones acompañado. Además, cada cierto tiempo Blizzard añadirá jefes mundiales poderosísimos, tanto que será imposible que los puedas derrotar sin la presencia de otros jugadores a tu lado.

Monturas para explorar

Evidentemente, teniendo un mundo abierto enorme a nuestro alrededor, algo que no podía faltar en esta entrega son las monturas. Aunque no están disponibles desde el inicio, avanzando en la campaña llegará el momento en que podamos desbloquear caballos, y estos corceles serán una función de lo más útil para movernos más deprisa. Se pueden llamar en cualquier momento a nuestro lado y hasta podemos combatir a lomos de ellos o personalizar sus armaduras y trofeos. Una adición que seguro muchos aficionados agradecerán y disfrutarán.

Creación de personajes más profunda

El sistema de personalización de personajes es completamente nuevo en Diablo 4. El equipo de Blizzard ha trabajado para traer un montón de mejoras a este respecto, prestando atención a los pequeños detalles, como el hecho de incluir pendientes y sortijas, tatuajes, colores de vello facial... Pese a no ser un sistema que ofrezca una enorme profundidad (no esperéis un nivel de opciones como en Los Sims), seguro que a muchos usuarios les gustará poder personalizar a su personaje con mayor precisión. Por no olvidarnos de que en esta ocasión las escenas de historia han sido renderizadas con el motor del juego, así que durante las mismas podremos admirar a nuestro personaje tal y como lo hemos diseñado a nuestro gusto.

Códice de poder y aspectos legendarios

Una de las nuevas mecánicas que introduce Diablo 4 es el llamado Códice de poder, una característica que va a permitir a los jugadores tener un mayor control de sus construcciones de personaje. Básicamente, a través de los ocultistas los usuarios podemos extraer e imprimir aspectos de los objetos, lo que vienen a ser poderes legendarios que se obtienen principalmente completando mazmorras por el mundo. Estos aspectos sirven para cambiar y potenciar habilidades y están centrados en cada clase de forma exclusiva, por ello suponen un interesante aliciente a la hora de maximizar al máximo las capacidades de nuestro personaje.

¿Diablo 4 o Diablo 3? Cuál es mejor

Tal vez todavía sea pronto para decidir qué entrega es mejor. Si bien, todo hay que decirlo, mayoritariamente la crítica especializada parece haber acogido la salida de Diablo 4 con mayor entusiasmo que Diablo 3 en su día. Esta nueva entrega, a pesar de no ser perfecta, mejora y corrige muchos de los errores vistos en Diablo 3, ofreciendo una historia mejor escrita y desarrollada y una mayor profundidad en la personalización de equipos y objetos. Sin olvidarnos de que posee un estilo de juego más metódico en el que es importante planificar bien nuestra construcción de personaje a medida que subimos de nivel.

Aún está por ver cuáles serán los próximos pasos con Diablo 4, ya que evidentemente esto solo acaba de empezar y Blizzard tiene mucho camino por recorrer con esta entrega. La empresa ha prometido temporadas, nuevos pases y próximas expansiones en formato DLC en las que ya están trabajando. El futuro, de momento, se antoja prometedor.

Diablo 4 es el nuevo Action-RPG de Blizzard que ya está disponible en todo el mundo desde el 6 de junio de 2023 en PC, PS4, PS5, Xbox One y Xbox Series X/S. Si os interesa, podéis leer nuestro análisis o profundizar en más contenidos del juego con nuestra guía de consejos y secretos.