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Defiende a César
Vas en un carro, lo que limita tus opciones de defenderte, pero no deberías tener grandes problemas para superar esta sección. Cuando aparezca el elefante, no dejes de disparar, aunque no le hagas daño. Si paras, te aplastará y tendrás que repetir la sección. Bayek pasará de las flechas y recurrirá a usar lanzas, que sí que acabarán con el elefante.
Mata a Potino
Bayek tiene por encargo acabar con Potino, el Escorpión. Atraviesa el campo de batalla (no tienes necesidad de detenerte en ningún punto. Cuando llegues al objetivo, verás que el cobarde está subido a lomos de otro elefante de guerra al que debes derrotar.
Si bien todo depende del nivel con el que llegues, el sistema para derrotarlo es simple. Espera a que cargue y esquiva hacia su izquierda, para evitar la trompa. Una vez estés a un lado o detrás, golpea hasta que salga corriendo y repite. Recuerda usar la Sobrecarga cada vez que la tengas cargada, para hacer tanto daño como sea posible.
Mata a Septimius
César nos indicará dónde está Septimius, el Chacal: se encuentra en una aldea cercana. Así pues, dirígete ahí para dar con él y poner fin a la orden. No es diferente a cualquier enemigo poderoso y a estas alturas no deberías tener grandes problemas.
Sin embargo, cuando lo derrotas, César te impide matarlo: Septimius debe ser juzgado por las leyes romanas. Aya tampoco asesina a Ptolomeo, que muere atacado por cocodrilos.
Tras los acontecimientos, descubriremos que Cleopatra es la nueva faraona. Septimius sigue vivo y está junto a ella y César. Apolodoro no está de acuerdo con la situación y quiere ayudarnos, pero necesita tiempo. Mientras tanto, en una reunión, Bayek se muestra resuelto: alguien debe proteger al pueblo, separarse del poder establecido. Ha nacido lo que será conocido siglos después como la Hermandad de los Asesinos.