Naruto: Rise of a Ninja fue un título muy interesantes para Xbox 360 el año pasado. En exclusiva para la consola de Microsoft, este juego de acción, aventura y combate contaba los primeros capítulos del manga Naruto, uno de los más populares del momento, en forma de juego de acción/aventura con un mundo abierto –la aldea de Naruto-, misiones de todo tipo, interacción con numerosos personajes, y un sistema de combate uno contra uno. El resultado fue más que bueno y, por sorpresa, Ubisoft anunció en el E3 la segunda parte de las aventuras de este aprendiz de Ninja. Tuvimos oportunidad de ver el juego en movimiento durante un buen rato, en una presentación a puerta cerrada, para ver cómo evoluciona esta segunda parte lo visto en el primer juego.
Naruto: The Broken Bond continúa allá donde lo dejó el primer juego, y nos encontramos con la aldea de Naruto destruida por unos villanos y sin un jefe, ya que el Hokage ha muerto.
La misión de nuestro héroe será restaurar y reconstruir la aldea, encontrar a un nuevo jefe, y ayudar a Sasuke, su amigo, a volver al buen camino, que parece haber perdido.
La historia, que cubre el siguiente bloque de capítulos de la serie de animación, no es el único cambio en el juego. The Broken Bond ya no es una aventura individual de Naruto sino que iremos siempre en grupo, controlando a tres personajes, de entre siete en total que podremos controlar a lo largo del juego. El control de estos tres personajes en el modo de exploración nos obligará a coordinar las habilidades de cada uno de ellos para ir avanzando.
El mapeado del juego también ha cambiado por completo, así como buena parte de los gráficos. Aunque The Broken Bond mantiene el estilo del primero, tanto Naruto como los otros personajes han sido rediseñados desde cero, así como todos los escenarios del juego, desde la aldea de la hoja verde hasta los bosques que lo rodean. Se mantienen elementos jugables del primer juego, como los saltos entre árboles o el uso de magias para interactuar con el escenario, pero estos minijuegos se han adaptado para la acción coordinada de nuestros personajes.
Por ejemplo, explorando el escenario usábamos a uno de nuestros personajes que tiene la habilidad mágica de sentir peligros, por lo que podíamos ver dónde había trampas y así superar ese obstáculo. Luego, para entrar en un pueblo, usábamos la habilidad de Naruto de multiplicarse para tender un puente, y la habilidad de un personaje para convertirse en una sombra, para poder deslizarnos por ese puente y entrar en la ciudad por un hueco. Estos usos coordinados de habilidades no parecían demasiado evidentes, lo que exigirá a los jugadores que piensen sus acciones.
En la demo que nos hicieron pudimos ver también cómo las partes de plataformas del juego se han refinado, siendo menos forzadas que en la anterior entrega y mostrándose más variadas, aparte de que se ha mejorado el efecto del agua, mucho más vistoso ahora. Finalmente pudimos ver un combate, en el que Naruto y sus dos amigos se enfrentaban a una serie de bandidos. Como si de lucha libre se tratase, podremos darnos el relevo, cambiando de personaje para luchar, para usar el que más nos conviene en cada situación. El sistema de lucha ha cambiado todos sus golpes pero el control se mantiene igual a grandes rasgos, salvo por la adición de magias en tiempo real que se complementan con las que desencadenan secuencias cinemáticas.
Naruto: The Broken Bond nos ha impresionado por cómo mejora lo visto en el anterior juego, una aventura muy lograda, y cómo desde cero cambia para mejor la mayoría de sus facetas. Este año, también exclusivo para Xbox 360, llegará a las tiendas.