El próximo 21 de julio recibiremos Splatoon 2, secuela del emocionante shooter en tercera persona cuya primera entrega se lanzó en 2015 para Nintendo WiiU y que ahora llega cargado de novedades y en exclusiva para Switch. Aunque durante la presentación pudimos probar las nuevas armas y modos del competitivo (contenido que fue mostrado con todo lujo de detalles en el último Nintendo Direct dedicado en exclusiva al título), estas impresiones se centrarán únicamente en el modo Héroe, nombre que ha recibido la campaña para un jugador.
Mucho se ha hablado durante los últimos meses sobre si esta secuela estaba justificada o acabaría siendo simplemente una edición especial como ya sucedió con Mario Kart 8 Deluxe. Sin duda, después de probarlo en profundidad tenemos muy claro que no estamos ante un lavado de cara, sino ante un videojuego que ha pulido su excelente jugabilidad, mejorado audiovisualmente y crecido con gran cantidad de nuevo contenido que da como resultado una experiencia profunda y novedosa.
Modo Campaña
El modo Héroe es una experiencia diseñada exclusivamente para ser disfrutada en solitario y en la que iremos desbloqueando diferentes zonas, ofreciéndonos cada una de ellas varios mundos y un jefe final. El primer escenario será Base Tentáculo, lugar en el que nos encontraremos con Tina.
Ella nos nombrará Agente 4 del Comando Branquias y nos pedirá que rescatemos al Gran Siluro, responsable de dar electricidad a toda Cromópolis. Nuestros enemigos, y responsables del secuestro del Gran Siluro, serán los octarianos, un temible ejército de pulpos que contará con un nutrido y variado plantel de criaturas.
Para acceder a los diferentes niveles tendremos que encontrar las entradas secretas dentro de cada escenario. Dichos mundos podrán completarse en el orden que queramos, centrándose cada uno de ellos en nuevos tipos de plataformas y armas para crear retos cada vez más complejos.
De esta forma, disfrutaremos de una gran variedad de objetos repartidos por el escenario como esponjas que se hinchan al dispararlas, raíles que nos permiten desplazarnos entre plataformas, rodillos que se activan con pintura o grandes peces globo que explotan y llenan todo el entorno de tinta. Por los escenarios también podremos ir recogiendo distintos coleccionables y objetos especiales, así como bolas naranjas que podremos utilizar para mejorar nuestro arsenal dentro del modo Héroe.
Además de enfrentarnos a mundos con plataformas cada vez más complejas, también iremos encontrando diferentes enemigos que se combinarán para exigirnos un gran dominio del personaje. Entre ellos encontraremos pequeños pulpos voladores, grandes seres equipados con potentes armas o peces asesinos, teniendo que controlar muy bien los diferentes tipos de armas y habilidades especiales si queremos sobrevivir. Además, es importante señalar que, aunque el modo cuenta con una pequeña trama que estructurará la jugabilidad, la línea argumental carecerá de importancia en la mayoría de niveles, profundizándose poco en la interesante historia que se empezó a intuir en la primera entrega.
Finalmente, una vez completemos los mundos de cada escenario se desbloqueará una entrada especial que nos enfrentará a un jefe final. El primero será una tostadora industrial gigante que nos atacará con trozos de pan, un primer reto bastante sencillo pero que deja clara la dinámica jugable que seguirá esta segunda entrega en su modo para un jugador.
Después de jugar en tres escenarios diferentes y en más de una decena de mundos, debemos reconocer que Nintendo ha realizado un gran esfuerzo para crear un modo campaña exigente, emocionante y con una enorme variedad de situaciones. Para ello no solo han creado todo tipo de estructuras y enemigos, sino que también han llevado a cabo un brillante diseño de niveles capaz de guiarnos de un punto a otro del mapa con total naturalidad.
Por su parte, el control sigue siendo muy bueno gracias a una excelente movilidad y un manejo preciso de las distintas armas, pudiendo elegir entre apuntar con el giroscopio o utilizar el stick derecho del mando. Lógicamente, dadas las bondades del hardware de Nintendo, vamos a poder jugar tanto con la consola en modo portátil como conectada a la televisión, encontrando en ambas opciones un rendimiento igual de estable a 60 fotogramas por segundo. Además, tendremos la posibilidad de jugar con el mando Pro, el Joy-Con Grip o directamente con la portátil, siendo la experiencia igual de divertida y precisa en todos los modos de control.
En lo que respecta al apartado artístico se ha hecho un trabajo sensacional para dotar a este mundo de una ambientación única que transmita a la perfección toda la esencia de Splatoon. Además, el modo Héroe consigue un apartado gráfico más pulido gracias a la menor exigencia técnica, ofreciendo más efectos de partículas y una enorme cantidad de enemigos y objetos moviéndose por el escenario. El sonido por su parte sigue estando a un gran nivel, regalándonos no solo una gran sonorización de los distintos mundos, sino también una excelente banda sonora.
Sin duda, Nintendo ha realizado un gran trabajo con los mundos que hemos podido probar, y aunque esperábamos un poco más de carga narrativa, lo importante es que disfrutaremos de una experiencia con un medido equilibro entre las exigentes plataformas y los enfrentamientos contra enemigos, lo cual da como resultado un emocionante modo para un jugador. Para poder disfrutar de esta nueva modalidad, y de todo el contenido que incluirá Splatoon 2, tendremos que esperar hasta el próximo 21 de julio, día que saldrá a la venta de forma exclusiva para Nintendo Switch.
Hemos escrito estas impresiones tras probar el juego en un evento organizado en el showroom de Nintendo en Madrid.