Después del Nintendo Direct ofrecido hace unas horas centrado en ARMS, ya hemos podido probar una versión final de este curioso, original y, por lo que parece, bastante divertido arcade de lucha de Nintendo.
Ya sabéis que la Gran N no suele hacer las cosas como los demás y, en el terreno de la lucha, ya nos ha dejado obras muy diferentes a lo establecido en los tradicionales juegos de peleas como bien puede ser la saga Super Smash Bros. Precisamente ARMS va a ser un juego claramente distinto y muy refrescante dentro de este género, título que no se parecerá demasiado a lo que nos ofrecen (o lo harán en breve) los títulos más recientes de esta misma categoría como Injustice 2, Tekken 7 o el mismo Ultra Street Fighter II: The Final Challengers.
Las peleas más refrescantes
Junio parece un mes muy propicio para disfrutar de experiencias más refrescantes, algo que sin duda nos proporcionará este juego.
Sí, porque lejos de ofrecernos lo de siempre, por así decirlo, lo que va a dispensarnos será un concepto de la lucha bastante particular.
Ya sabéis que la idea base que servirá para dar vida a este juego serán las batallas entre dos personajes (aunque dicho número podrá aumentar) que gozarán de la característica particular de poseer brazos extensibles y diferentes tipos de puño que podremos ir escogiendo antes de saltar al ring. Una especie de combate de boxeo pero bastante evolucionado. Y a esto se sumará la aparición espontánea durante cada batalla de algún que otro objeto especial, como bombas de distinto tipo o revitalizadores de energía, ítems que aportarán más gracia y un toque picante a cada enfrentamiento.
Precisamente esta posibilidad de personalización tan atractiva pudimos experimentarla a fondo en la nueva versión que probamos de esta nueva creación de Nintendo en exclusiva para Switch, la cual estamos convencidos que aportará su granito de arena en aportar al título una profundidad mayor y una gran carga estratégica.
En efecto, antes de cada pelea podremos escoger el puño de nuestro protagonista, uno para cada brazo, existiendo una amplia cantidad de ellos. De inicio cada uno de los protagonistas poseerá tres característicos y adecuados a sus particularidades, si bien a lo largo del juego y a cambio de un número determinado de monedas (objetos que podremos ir consiguiendo a medida que juguemos a las diferentes modalidades) será posible ir adquiriendo los pertenecientes o vinculados al resto de personajes. Y no sólo eso, dado que también será posible ir potenciando los distintos tipos de puño durante las partidas, aspecto que dotará de un leve aire RPG a esta producción.
Las diferencias entre unos y otros serán tremendas en todos los sentidos. Habrá de todo, desde cuchillas a guantes más bien comunes, escudos, mazas, etc. Todos ellos poseerán además un peso determinado (que afectará a su velocidad de ejecución) así como un alcance concreto y, también, muchos de estos ítems incluso poseerán algunos atributos adicionales (hasta siete distintos) como relámpago, fuego, viento o hielo. Por eso será muy importante elegir con sabiduría nuestros guantes especiales antes de cada enfrentamiento.
Diez protagonistas (salvo la llegada de alguna sorpresa adicional) serán los que formarán parte del elenco de personajes elegibles. Y dicho plantel estará formado por luchadores verdaderamente únicos y claramente diferentes entre sí, desde ninjas a momias, experimentos raros o estrellas del cine. Puede que dicho elenco sea algo escaso (a nosotros así nos lo parece), pero Nintendo ya ha anunciado que posteriormente irá añadiendo ya no sólo nuevos personajes sino también más arenas, modos de juego y demás características de forma totalmente gratuita, siguiendo un esquema similar al seguido por Splatoon de Wii U.
No queremos dejar sin resaltar un aspecto que nos ha llamado mucho la atención de este título. Y es que cada uno de los luchadores poseerá su propio escenario, el cual estará especialmente acondicionado para explotar al máximo las cualidades de los distintos personajes. Por ejemplo, el de Ribbon Girl, luchadora cuya mayor cualidad será su faceta aérea, estará rodeado por una especie de trampolines que nos impulsarán si saltamos encima de ellos. Una característica que nos ha gustado mucho y que seguramente los jugadores sabrán apreciar.
Una vez que saltamos al ring en la nueva toma de contacto que disfrutamos con el título, experimentamos nuevamente una jugabilidad mucho más profunda y estratégica de lo que cabía esperar. El juego será muy arcade, eso está claro, pero los que piensen que con lanzar puñetazos a diestro y siniestro será suficiente para conseguir doblegar al adversario correspondiente se llevarán una sorpresa.
Olvidaos de poner en práctica la famosa técnica machacabotones porque no funcionará en absoluto en este caso. Será necesario calcular bien la dirección de nuestros puñetazos, como si de un shooter se tratara, y esperar al momento justo para efectuar maniobras como esquivar, saltar y contraatacar. Por eso mismo nos pareció mucho más preciso el control tradicional que el que se basaba en el uso de los sensores de movimiento de los Joy-Con, mandos que podrán sostenerse por separado (uno en cada mano, simulando los puños) y que, eso sí, aportarán mayor "realismo" a cada pelea.
Pelea como más te apetezca
También pudimos probar casi todos los modos de juego, los cuales serán bastante variados… aunque se dejará notar el carácter multijugador que albergará esta producción, dado que la mayoría de las pruebas darán lo mejor de sí disfrutando de ellas junto a un amigo o incluso varios.
El modo principal se llamará Gran Premio y vendrá a ser el clásico modo Arcade en el que tendremos que pelear contra diez enemigos, uno detrás de otro (¿habrá jefe final?). Antes de iniciar dicha modalidad será posible escoger el nivel de dificultad entre siete posibles y, cuanto mayor sea el nivel de reto, más monedas obtendremos. Podremos jugar tanto de manera individual como a dobles.
Esta opción estará acompañada de un buen puñado más, comenzando por Versus (que admitirá peleas para cuatro jugadores simultáneos) y continuando por otras modalidades mucho más originales. Por ejemplo, la que más nos gustó fue Voleibol. En lugar de jugar con un balón normal, éste tendrá en su interior una bomba y nuestro cometido será intentar que ésta explote en el campo del rival para obtener puntos. Baloncesto tampoco estaba mal, y en este caso en lugar de jugar con un balón de por medio, los encuentros se disputaban a media cancha y nuestra meta era tratar de agarrar a nuestro oponente y meter canasta con él.
Otro desafío que nos gustó mucho fue el bautizado como Los 100 Adversarios, un modo de juego en el que debíamos sobrevivir al ataque de un centenar de criaturas que nos atacaban por oleadas cada vez más numerosas y difíciles de superar. Llegamos a deshacernos de 70… Y para terminar también era posible disputar pruebas de Tiro al Blanco en las que debíamos acertar con nuestros puños a la mayor cantidad posible de dianas que aparecían en el escenario desde una posición que únicamente nos permitía desplazarnos lateralmente.
Lo que no pudimos probar por cuestiones obvias fue el modo Online, opción que seguramente se convertirá en uno de los reclamos más importantes del juego cuando aparezca el próximo 16 de junio.
Y para terminar, debemos afirmar que visualmente nos gustó mucho lo que contemplamos. Las animaciones de los protagonistas eran tan fluidas como ágiles, y tanto el diseño de los propios personajes como el de los decorados llamaba la atención por su colorido y plasticidad general. Además la tasa de imágenes por segundo a 60fps se mostraba muy estable, incluso cuando disputamos un par de partidas a dobles a pantalla dividida, y solo funciona a 30fps cuando participan cuatro jugadores desde la misma consola, como en Mario Kart 8.
El 16 de junio Nintendo pondrá a la venta esta nueva saga, la cual muchos vemos en ella como el sucesor espiritual del gran Punch Out!! Pero antes podremos probar el título de manera gratuita con los llamados Global Testpunch, que tendrán lugar durante los días 27 y 28 de mayo y 3 y 4 de junio.
Hemos realizado estas impresiones tras probar el juego en el Showroom de Nintendo en Madrid.