Una remasterización se puede lanzar por dos motivos: para continuar el éxito de un juego en nuevas plataformas o para dar una segunda oportunidad a aquellos títulos muy poco que merecían un poco más de reconocimiento. El resumen siempre es el mismo: rentabilizar más las viejas glorias, pero parece que el segundo caso es más fácil de justificar cuando el juego que se actualiza lo merece. Esa es la situación de Valkyria Chronicles, uno de los mejores RPG tácticos de la pasada generación que ha saltado de PlayStation 3 a PC y ahora a PlayStation 4.
Aunque os hablaremos más de su historia o jugabilidad en nuestro análisis, poco más podemos contar de este clásico de Sega lanzado en 2008 que no hiciésemos en el texto original. Se trata de una aventura ambientada en una realidad alternativa y fantástica de la IIª Guerra Mundial desde una perspectiva muy interesante: un pequeño grupo de resistencia. La Alianza Imperial y la Federación Atlántica se encuentran en un encarnizado enfrentamiento en el que un pequeño país independiente llamado Gallia, cuya posición estratégica y cantidad de recursos de un preciado material (el ragnite) lo convierten en un objetivo para la superpotencia de la Alianza Imperial, cuyo poder bélico aparentemente hará sucumbir Gallia sin muchos problemas.
El joven Welkin Gunther se ve envuelto en el conflicto cuando conoce a Alicia Melchiott. Ella y un puñado más de soldados con más entusiasmo que experiencia se proponen la dura misión de expulsar a los invasores de su tierra con la única pero inestimable ayuda de un pequeño tanque.
Welkin se ganará pronto la confianza de su pelotón y la responsabilidad de dirigir a un equipo que deberá sobreponerse a todas las dificultades que surjan.
Amistad, amor, rivalidades, la dureza de la guerra para la población civil e incluso el racismo –con un curioso giro de tuerca- son temas que Valkyria Chronicles toca con sus carismáticos protagonistas. Un apasionante argumento que nos enganchó de principio a fin.
¿No eres aficionado a la estrategia? ¿Te parece aburrido gestionar un ejército sobre un mapa luchando con una compleja interfaz? Sega desarrolló este juego y sus posteriores secuelas de PSP con las consolas en mente, así que disfrazó su jugabilidad táctica bajo una apariencia mucho más atractiva a ojos del aficionado a la acción 3D sin recortar las posibilidades del género. Logra el equilibrio más difícil: gusta a los jugones del rol estratégico y a los novatos que desconocían que les podía gustar. La curva de dificultad está muy bien ajustada, comienza asequible y progresa hasta un nivel donde sólo la planificación más inteligente puede conseguir la victoria.
Utiliza el sistema de turnos y clases de soldados muy especializados en sus tareas: tropas de exploración –las que disponen de mayor recorrido para avanzar-, tropas de asalto –preparadas para atacar a otras unidades-, ingenieros –de apoyo para reparar el tanque y reponer munición-, francotiradores –certeros tiros a gran distancia- y un tipo de soldado armado que puede destruir tanques enemigos. Cada clase dispone de ventajas e inconvenientes, y dentro de ellas, los personajes son únicos. Soldados con amistad funcionan mejor juntos, un chico puede ganar extras cerca de chicas, o se lleva mal con cierto personaje, tiene alergia a los entornos naturales o al contrario -Welkin por ejemplo es un apasionado del campo-. Los detalles marcan las diferencias.
El manejo de los soldados se inspira en los juegos de disparos pero con las limitaciones propias de la estrategia. El desplazamiento se restringe por una barra, cada arma dispara una ráfaga concreta y el número de aciertos necesario para matar al enemigo se muestra en pantalla. No es necesaria ninguna habilidad o reflejos, el tiempo se pausa en el momento de apuntar, si bien en la exploración cada bando reacciona cuando siente la presencia del oponente –dicho de otra manera, si te acercas a un soldado enemigo te disparará aunque no esté en su turno-. Se utilizan coberturas, tiros a la cabeza para mayor daño y en definitiva, la base es muy fácil de aprender.
La remasterización
En nuestro análisis profundizaremos más en todas las opciones del juego, la subida de nivel de unidades, la personalización del tanque o las misiones opcionales de emboscadas, así como los detalles técnicos de Remastered. Nuestra primera impresión: correcta sin más. Sufre de las mismas carencias que en PC, estamos más en una adaptación directa con ligeras mejoras en lugar de un remozado gráfico a la altura de otras colecciones actualizadas.
El resumen es el siguiente: resolución de 1080p –frente a los 720p del original-, 60 imágenes por segundo -30 en PS3-, selector de voces en inglés y japonés –textos en inglés-, sistema de trofeos –el original se lanzó cuando no era norma obligatoria en los juegos de PlayStation 3- y todo el contenido descargable. Respecto a esto último se trata de un modo de dificultad Hard EX para las escaramuzas donde el Edelweiss no está disponible, la misión de Edy, una misión de Selvaria –la valquiria que aporta el elemento fantástico a la historia- y el Desafío del destacamento de Edy.
Valkiria Chronicles utiliza el motor Canvas, una combinación de sombreado y texturas para dar un característico estilo de lápiz con acuarela. Gracias a que se basa más en la parte artística que en la potencia gráfica no es un apartado que esté muy anticuado, lo cierto es que en este caso no hemos echado en falta mejores texturas o modelados. Es un estilo coherente que no ha perdido calidad, aunque es obvio que está lejos del detalle de Valkyria: Azure Revolution –nativo de PS4- y que hay fallos o cuestiones que ahora deberían estar revisadas, como la animación de las muertes –muñecos con físicas Havok-.
Sin embargo los gráficos no son todo lo espectaculares que cabría exigir a una remasterización. Sufre dientes de sierra por falta de antialiasing que afean el pelo, el césped y los objetos pequeños de la pantalla. Valkyria Chronicles en PS4 es muy nítido en una gran pantalla, mucho mejor del resultado que se conseguiría jugando a la versión original, pero no la calidad de imagen no es todo lo perfecta que debería. Es difícil culpar a Sega si tenemos en cuenta que las expectativas de ventas no justifican un remozado similar al trabajo que realiza Blue Point en sus encargos.
Una joya del género
Valkyria Chronicles es un juego incombustible. Rejugarlo en Remastered nos recuerda por qué nos gustó tanto en su momento: es divertidísimo, la historia nos implica con el destino de los personajes y el planteamiento aparentemente "casual" no rebaja para nada la estrategia que los usuarios exigentes demandan. La remasterización simplemente correcta, las hay bastante peores y también mejores. Probablemente no justificará una nueva compra, pero quien carezca de otra versión debería ir apuntando la fecha: 17 de mayo.
Hemos realizado estas impresiones con un código de descarga que nos ha proporcionado Koch Media.