Cuatro años después de su estreno Moss sigue siendo uno de los mejores juegos de PlayStation VR. La aventura de plataformas y rompecabezas protagonizada por la adorable ratona Quill, además de un título divertidísimo, supuso una aproximación original e interesante a la tecnología de la realidad virtual. Donde casi todos los juegos apostaban por ponernos en la piel del protagonista, en ser sus manos y sus ojos, la obra de Polyarc relegó al jugador a ser un ente etéreo que observaba el mundo desde arriba, interactuando con el escenario para permitir el avance de la ratona (a la que también controlaba) por los niveles y ayudándola mientras daba espadazos.
El concepto sigue siendo innovador casi un lustro después, un tiempo en el que el pequeño estudio de Seattle fundado por exempleados de Bungie (Halo, Destiny) ha estado manos a la obra con la secuela, que según nos contó Josh Stiksma (director de diseño e ingeniero principal) en una presentación digital a través de Discord lleva muchos años en desarrollo. Es fácil hacer los cálculos: tras el estreno del original en febrero de 2018, la versión para PC se lanzó en junio, se trasladó a Meta Quest en 2019 y se amplió con el DLC gratuito Twilight Garden poco después. Así, Moss Book II llegará al casco de realidad virtual de Sony para PlayStation 4 el próximo 31 de marzo.
El retorno de la RV (la ratona virtual)
La premisa será la misma: Quill y el jugador tendrán que explorar nuevas áreas, enfrentarse a nuevos enemigos y resolver desafiantes puzles para poder continuar con la aventura. El subtítulo que hace referencia a un segundo libro deja claras las intenciones del juego: ser una secuela continuista mecánica y argumentalmente.
La historia del primer juego se narraba con un cuento cuyas páginas son nuevos escenarios en los que nos sumergimos con la realidad virtual. La estructura será la misma, y de hecho, la trama continúa justo donde la dejamos.
Quill tendrá que adentrarse en las profundidades del castillo donde concluía la primera aventura para evitar que el tirano que la acecha la captura y para impedir que las fuerzas de Arcane se hagan con su cristal y devolver la paz al mundo una vez más. Desde Polyarc se muestran confiados en la historia, que será más larga que en su predecesor, y que promete profundizar más en la conexión emocional entre la ratoncita y los jugadores. A pesar de ser una continuación, Moss Book II podrá disfrutarse sin haber jugado el primero (de hecho, se incluye un resumen de lo acontecido previamente), pero Polyarc admite que parte de la gracia está en haber desarrollado ese vínculo emocional con la ratona.
En la presentación pudimos ver alrededor de 15 minutos de gameplay de dos zonas separadas. La primera sección pertenecía a los primeros compases de la aventura: Quill recorre los frondosos y preciosos jardines del castillo para llegar al invernadero, enfrentándose a escarabajos gigantescos, saltando entre estructuras de piedra medio derruidas y aprovechándose de las plataformas que movemos, de nuevo, usando el sensor de movimiento del DualShock 4 como cursor mientras que con las palancas y los botones manejamos a la ratona.
Aquí ya vimos una de las nuevas mecánicas: la posibilidad de crear conexiones entre distintos elementos del escenario de juego, por ejemplo, cogiendo una enredadera y estirándola para crear un puente. Polyarc asegura que se han querido centrar en añadir más interacciones físicas con el mundo, influidos en parte por los grandes éxitos de los últimos años en el ámbito de la realidad virtual en cuanto a ideas interesantes para la exploración: Half-Life: Alyx y Astro Bot: Rescue Mission. Esa interacción no solo será con el nivel, sino también con los enemigos. Había un escarabajo que, tras aturdirlo con Quill, podíamos agarrarlo y lanzarlo cual bola de pinball para activar un mecanismo.
Una ratita de armas tomar
La segunda zona que vimos nos llevaba a las profundidades del castillo, a una suerte de fragua o mina repleta de fuego, lava, túneles estrechos y esos mecanismos repletos de tuercas que tan satisfactorios son de manipular en realidad virtual. En esta ocasión Quill contará con varias armas que tendrán utilidad tanto en el combate como en los puzles, y en esta área tan cálida conseguimos una de ellas: el martillo. En esa sección había varios puzles en los que Quill utilizaba sus poderes para invocar una versión etérea del martillo que el jugador podía utilizar para interactuar con los mecanismos, de modo que podíamos llevar a la ratona hasta cierta plataforma y luego accionar un botón con el martillo.
En los combates, el martillo es un arma enorme para la ratona que da otro ritmo a los enfrentamientos respecto a la espada: será necesario para romper la coraza o el escudo de ciertos adversarios y los movimientos serán más lentos, pero también más contundentes. Podremos cambiar al vuelo entre varias armas, por lo que, aunque no lo vimos en el gameplay, sobre el papel está la posibilidad de que haya secciones de acción más profundas y desafiantes que en el primer juego. Lo que sí promete Polyarc es que los enfrentamientos contra jefes finales serán más interesantes, combinando combate con puzles. Además, han querido aprovechar la obtención de nuevos poderes y armas para motivar el backtracking a fases previas.
El 31 de marzo para PS VR, y más tarde en otras plataformas
Como veis, Moss Book II se dibuja como una secuela continuista que va a la fórmula clásica del más y mejor, algo totalmente apropiado con un concepto con tantas posibilidades y tan poco explotado como el que sorprendió hace cuatro años. Polyarc demostró entonces una gran creatividad en el uso de la tecnología y en las creación de situaciones interesantes para Quill y el jugador, y si a sus propias ideas suman los avances realizados en las aventuras de plataformas para realidad virtual durante los últimos años, a buen seguro que el próximo 31 de marzo nos espera una gran y mágica aventura en PlayStation VR… y más tarde en otros sistemas no especificados.
Hemos realizado estas impresiones gracias a una presentación digital de Polyarc a la que hemos sido invitados por ICO Partners.