En 2007 BioWare dio inicio a Mass Effect, una historia que se extendió a lo largo de tres juegos y que nos conquistó por demasiados motivos como para ser enumerados. Sus carismáticos personajes, su fascinante y riquísimo universo de infinitas posibilidades, la capacidad de decisión que nos daba, sus apabullantes apartados audiovisuales o sus emocionantes combates son solo unas pocas de las muchas virtudes por las que el épico viaje del Comandante Shepard ha permanecido en la memoria de todos los jugadores que decidimos darle una oportunidad y sumergirnos en esta inigualable ópera espacial.
Ahora y para sorpresa de nadie, la mítica desarrolladora está trabajando en un recopilatorio que nos permitirá disfrutar de la trilogía al completo en las plataformas actuales, aunque en vez de contentarse con una simple subida de resolución, aquí lo que nos van a ofrecer es una remasterización con multitud de mejoras gráficas que harán que luzca mejor que nunca.
Un gran lavado de cara para tres aventuras inolvidables
Así pues, Mass Effect: Legendary Edition traerá consigo Mass Effect, Mass Effect 2 y Mass Effect 3, así como todos los contenidos descargables que se lanzaron para ellos, incluyendo expansiones, incentivos de reserva y extras promocionales de diferente tipo. El objetivo de BioWare con esta trilogía no es realizar un remake de la saga ni alterar sus bases jugables, sino optimizar la experiencia original para que sea mucho más agradable de jugar a día de hoy, facilitando la entrada a aquellos jugadores que se la perdieran en su momento y haciendo más satisfactorio el regreso a este universo para quienes quieran revivir su historia.
Como podréis intuir, esto equivale, sobre todo, a mejoras visuales, aunque no se han contentado solo con eso y también hay pequeños retoques aquí y allá en diferentes apartados que nos han llamado mucho la atención y que prometen dar una mayor cohesión a los tres juegos incluidos.
Por ejemplo, ahora dispondremos de un menú principal desde el que podremos seleccionar el título al que queremos jugar, por lo que no serán tres programas independientes. Además, el editor de personajes es global para toda la trilogía y ha recibido multitud de mejoras para darnos más opciones a la hora de personalizar el aspecto de nuestro protagonista, lo que siempre es de agradecer.
En lo que respecta a su apartado audiovisual, se nota en todo momento que estamos ante una remasterización con muchos retoques, ya que los modelados y las animaciones no pueden esconder sus orígenes de hace un par de generaciones, pero no se puede negar que se ve bastante mejor de lo que esperábamos.
Para empezar, comentar que se ha aumentado la resolución hasta los 4K y si jugamos en Xbox One X, PS4 Pro, PS5 o Xbox Series X/S podremos disfrutar de una tasa de 60 imágenes por segundo. Además, es compatible con HDR, una tecnología que le sienta genial a la paleta de colores que usa la saga. Evidentemente, la cosa no acaba aquí, ya que también se ha aprovechado la ocasión para incluir infinidad de mejoras en casi cualquier elemento que os podáis imaginar. Quizá lo que más nos ha llamado la atención hayan sido las texturas, pues se han retocado y subido su resolución hasta límites insospechados, consiguiendo que, por ejemplo, las ropas y armaduras, luzcan genial, algo que en los originales tenía un aspecto borroso y muy mejorable. Lo mismo va para los escenarios.
Además, tampoco se ha perdido la oportunidad de actualizar modelados y shaders, dando como resultado unas mejoras muy notables en los propios personajes. Huelga decir que ahora los efectos también son más complejos y espectaculares, aunque, probablemente, lo más destacable sea la iluminación, la cual se comporta ahora en tiempo real, dándole a los juegos un nuevo aspecto con escenas, lugares y situaciones que transmiten unas sensaciones distintas, pero mucho más evocadoras y convincentes.
Al final, la suma de todas estas mejoras nos acaban dejando con un resultado que, por lo que nos han enseñado y lo que hemos visto en las comparaciones que desde BioWare nos han mostrado, nos ha gustado. Sigue siendo esa trilogía que tanto recordamos, pero con una nueva capa de pintura que, a pesar de no poder esconder sus orígenes, le sienta fenomenal.
Más allá de su aspecto gráfico, la desarrolladora ha querido incidir en las muchas mejoras que está recibiendo el primer Mass Effect para hacer que la experiencia sea más ágil, dinámica y gratificante. Por ejemplo, los icónicos tiempos de carga que teníamos que sufrir cada vez que usábamos un ascensor se han reducido de un minuto a apenas 14 segundos. Curiosamente, cuando la carga se complete nos aparecerá un mensaje opcional para que pulsemos un botón y se abran las puertas del elevador, así que si los personajes están conversando y queremos ver lo que dicen podremos optar por no interrumpirles.
El sistema de combate también está siendo revisado, modernizando el apuntado, las físicas y los tiroteos para hacerlo más similar a lo que vimos en Mass Effect 2 y 3, aunque sin renunciar a sus mecánicas únicas. Según nos han comentado, el título tendrá montones de mejoras de calidad de vida, aunque más allá de esto que os hemos comentado no nos han podido dar muchos más detalles al respecto, pues muchas de ellas todavía se están valorando y reconsiderando.
Shepard regresa a la acción
BioWare todavía tiene mucho trabajo por delante con Mass Effect: Legendary Edition hasta que se estrene el 14 de mayo, pero todo apunta a que va a conseguir su objetivo de permitirnos revivir o descubrir por primera vez una de las trilogías más importantes de la historia de los videojuegos en las mejores condiciones posibles gracias a un buen lavado de cara y a numerosas y pequeñas mejoras que prometen darnos la excusa perfecta para sumergirnos una vez más en este fascinante universo.
Hemos escrito estas impresiones tras asistir a una presentación online a la que fuimos invitados por EA.
