Análisis The Medium, terror a medio camino (Xbox Series X/S, PC)
El terror clásico, ese que se puso de moda durante los 128 bits, a remolque de éxito generado por Silent Hill y Resident Evil en la anterior generación, desapareció casi por completo cuando Resident Evil 4 cambió el género –y las aventuras de acción– para siempre. Nosotros somos unos grandes amantes de ese terror con las cámaras fijas que, salvo contadas excepciones, no ha vuelto. The Medium es una de esas excepciones.
Videoanálisis
Terror clásico al estilo Bloober
The Medium es una aventura narrativa de terror en tercera persona, que bebe mucho de sagas como Silent Hill, pero que no es, en absoluto, un survival horror.
Es importante dejar esto claro desde el primer momento, ya que es fácil hacerse la idea equivocada. Lo único que comparte con esos clásicos son algunos puzles y los ángulos de cámara fijos.
Así, se trata de un juego en el que jugamos para descubrir una historia, donde rara vez vamos a morir (o siquiera sufrir), y donde el mayor desafío es resolver unos puzles sencillitos o completar unas secuencias de infiltración también bastante sencillas. No esperéis combates, enemigos pululando por los escenarios, quedaros atascados en un puzle o nada parecido. Tampoco es un walking simulator, sino un juego a lo Layers of Fear o Observer.
En The Medium descubriremos la historia de, obviamente, una médium, capaz de cohabitar en dos planos de una misma realidad, pudiendo interactuar con almas atormentadas y la energía de un tiempo pasado. En muchos momentos, la realidad se desdoblará, partiendo la pantalla y permitiéndonos jugar en ambas realidades a la vez, algo que al final nos ha gustado mucho y nos ha convencido.
Esta doble realidad nos obliga a combinar las habilidades terrenales y extrasensoriales para progresar, ya que ciertos objetos estarán presentes en uno de los dos mundos, o ciertas zonas sólo estarán accesibles en una de las dos realidades. De hecho, podemos abandonar nuestro cuerpo físico durante unos instantes, algo que también se convierte en un elemento para ciertos puzles. Aunque durante la demo nos dejó algunas dudas, en la versión final nos ha gustado y convencido.
Terror disuelto en sencillez
Ya hemos dejado claro que no es un survival horror, pero incluso como aventura narrativa de terror, se queda corta en muchos aspectos. Para empezar, se queda corta en el terror. Los encuentros con enemigos se limitan a ciertos momentos puntuales, por lo que tienes la tranquilidad absoluta durante el resto del tiempo de que no te va a salir nada. Cuando te sale, tampoco vas a pasar mucho más miedo; el enfrentamiento va a ser un paseo absoluto, agachándonos para entrar en el modo sigilo y esperando a que mire para otro lado para pasar.
Los puzles también se quedan a medio camino, con algunas ideas muy, muy interesantes y clasiconas, cuya solución no tardan en darte a poco que simplemente interactúes con los objetos. Entendemos que Bloober ha querido hacer una aventura accesible, pero habría estado genial que en los dos o tres puzles interesantes que hay, al menos, nos dejase pensar. El resto no son puzles como tal, sino buscar objetos y ponerlos en su sitio.
A todo esto hay que añadirle que nuestra protagonista no se calla, comentando absolutamente todo y, de nuevo, sin dejarte pensar ni por un segundo «¿y ahora qué?». Sí, en los survival horror los protagonistas comentan todo con lo que interactúas, pero a nivel de inmersión no es lo mismo leer una línea de texto que tener a un personaje hablando constantemente, e incluso haciendo chistes. Esta sencillez, esta necesidad de llevar de la mano al jugador en todo momento, hace que incluso los momentos más impactantes del juego pierdan toda la emoción. La «batalla» final, por ejemplo, acaba siendo rápida y torpe porque te van arrastrando a lo que tienes que hacer. No te da tiempo ya no sólo de pensar, sino de pasar miedo.
Dos mundos, una historia
Aun así, hemos disfrutado mucho The Medium. Creemos que la historia es lo suficientemente interesante para engancharnos y que, sobre todo, a nivel visual consigue atrapar. Con excepción de algunos tramos que carecen de cualquier tipo de interacción relevante, es una aventura muy entretenida, y las 9 horas que nos ha durado han pasado sin que nos demos cuenta.
Técnicamente, en Xbox Series X, es un título muy vistoso, y sorprendente teniendo en cuenta que se trata, al fin y al cabo, de un proyecto independiente realizado por un estudio relativamente pequeño. Hay cosas que chirrían bastante, como las animaciones, pero los escenarios son geniales, y la idea de la doble cámara le da un toque muy único. Hay algunos problemas visuales, e incluso podemos ver las texturas cargar, algo que pensábamos que se solucionaría con las nuevas consolas, pero quizás algún parche previo al lanzamiento mejore este apartado. En lo correspondiente a la tasa de imágenes por segundo, es tremendamente inestable, pero al tratarse de un juego lento y con cámaras fijas no supone un problema grave.
En lo sonoro, como sabéis, Arkadiusz Reikowski y Akira Yamaoka se reparten el plano físico y el espiritual. En general, las composiciones están a muy buen nivel, si bien son bastante moderadas. Las de Yamaoka cuentan con su inconfundible sello, pero se echa de menos su presencia a la hora de diseñar los efectos de sonido que tan perturbadores llegaban a ser. Al igual que el resto de juego, es un acercamiento más relajado al género. Por último, comentar que nos llega con voces en inglés y subtítulos en castellano; subtítulos tremendamente irregulares pero que al menos sirven para seguir los acontecimientos.
Un entretenido homenaje
The Medium es una entretenida aventura de misterio con la que nos lo hemos pasado muy bien, pero que simplifica tantísimo todo lo que hace que acaba por disolver el terror que prometía. A pesar de la clarísima inspiración que toma de Silent Hill en lo audiovisual y lo narrativo, tiene poco de survival horror, aunque esto no tiene por qué ser un problema siempre y cuando vayáis con las expectativas correctas.
Nosotros lo recomendamos, sin lugar a dudas, a cualquiera que tenga ganas de un juego de este estilo, sobre todo, si no os importa que sea un acercamiento muy simplificado al terror de los 128 bits. De hecho, esperamos que Bloober se anime a apostar más fuerte por el survival horror en el futuro, porque tanta sencillez acaba por jugar en su contra, distrayéndonos de sus muchos buenos momentos e incluso dificultando la inmersión.
Hemos realizado este análisis en Xbox Series X con un código proporcionado por Premier Comms.