Análisis de Kinect Sports Segunda temporada (Xbox 360)

Los juegos de deportes parecen ya inherentes a cualquier control por detección de movimiento. Sin duda son una manera excelente de demostrar que el dispositivo en cuestión funciona y que sirve para eliminar de nuestras vidas el sedentarismo. Con kinect el encargado de demostrar su exactitud es Kinect Sports. El año pasado convenció con Kinect Sports y este año vuelve a hacerlo con la segunda temporada del juego.

El primer juego debía convencer de las bondades del dispositivo, y Rare decidió arriesgar poco, incluyendo aquellos deportes que tan bien le habían funcionado a Nintendo y otros con un gran número de seguidores en todo el mundo, caso del fútbol.

En esta ocasión todo tiene un aroma más estadounidense, con un deporte muy minoritario en cualquier otro país, el fútbol americano, y el béisbol, otro gran desconocido para la mayoría de países. Por suerte, hay otros cuatro deportes accesibles para todos.

El multijugador es uno de los puntos más fuertes del juego, como ya sucedió con su antecesor. En este caso puede ser en la misma consola por turno o a la vez dependiendo del deporte, o bien online, mediante una partida con otro jugador de Xbox Live o enviando un desafío a uno de tus amigos. Estos desafíos son minijuegos, y retas a tu amigo a superar tu puntuación.

El modo Desafío rápido es para 1 o 2 jugadores, y consiste en encadenar los distintos minijuegos hasta que queráis. Parece pensado para pasar un rato con un amigo sin tener que pensar en las pruebas que queréis incluir.

Como ya sucedía en el título original, la banda sonora es magnífica, protagonizada por canciones pop de los años 70 y 80. Es un placer ganar y ver cómo tu avatar realiza los gestos de la victoria al son de Never Gonna Give You Up, de Rick Astley.

El modo para un jugador cuenta con el aliciente de ir sumando puntos que se convierten en seguidores que te sirven para ir subiendo de nivel, aunque todo esto parece que sólo es útil para desbloquear recompensas de avatar. Es una característica algo exhibicionista que te servirá para comparar tu nivel con el de tus amigos, similar a los logros. Más útil puede ser el indicador de las calorías que gastas en casa partido y las que has consumido durante la sesión. No hemos encontrado la forma de saber el nivel de tu rival durante una partida online, y sería un dato interesante.

Puedes elegir rivales de tres dificultades diferentes, aunque la más fácil es en algunos casos ridícula. En los dardos sobre todo, si tú fallas cuando se acerca el final de la partida verás como tu rival, que venía puntuando un mínimo de 60, de pronto hace sólo cinco o diez puntos y lanza el dardo fuera de la diana.

En cuanto a los deportes en sí, son lo suficientemente variados como para pasar un buen rato. Casi todos tienen la posibilidad de jugar una sola persona, en multijugador en la misma consola y en partida de Xbox Live. Además, menos el fútbol americano, todos tienen minijuegos que sirven también de entrenamiento. En cualquiera de sus modalidades las partidas resultan bastante ágiles, y el único lastre son unos tiempos de carga bastante altos. Aunque la cámara capta bien tus movimientos, no siempre deben ser realistas, sino que hay gestos que se van incorporando al cógido que poco a poco se establece para kinect.

Por el contrario, el uso de Kinect demuestra hasta qué punto puede mejorar un juego el reconocimiento de voz. Para moverse por los menús resulta mucho más rápido decir dónde quieres ir y dentro del fútbol americano, por ejemplo, puedes ordenar el tipo de formación y empezar la acción con un "¡listos, vamos!". Pero puede cansar tener que activar el reconocimiento cada vez que aparece un menú nuevo.

Fútbol americano

Sólo juegas en ataque. Puedes dejar la elección de la formación al entrenador o decidirla tú. Empiezas como quarterback y pasas a uno de tus compañeros, y como él debes ir avanzando yardas evitando que te plaquen, aunque, igual que en el deporte real, no sueles correr demasiado antes de acabar en el suelo. En el kickoff cuenta el tiempo que tardas en lanzar y la fuerza con la que lo haces. Cuando llega la hora de defender ves en un esquema la acción del equipo rival.

Béisbol

En el minijuego cuentas con un número de pelota y se va sumando la distancia a la que la envías. Por turnos bateas y corres hasta la primera base –más que correr se trata de levantar las rodillas-, o lanzas la pelota, y en este punto es importante seguir las indicaciones del compañero situado tras el bateador. Para llegar a la primera base debes correr levantando mucho las rodilla y adelantar la pierna para tirarte al suelo y salvarte. En general, el juego detecta sin problemas si eres zurdo o diestro, en el caso del bateo simplemente por la posición que adoptas frente a la cámara y al lanzar porque debes alargar la mano para coger la pelota.

Golf

Entre el béisbol y el golf puedes sentir que estás jugando a Wii Sports, pero no es así. De hecho, el golf se juega con mucha más comodidad frente a Kinect. Cuanto más amplio es tu swing, más distancia recorre la pelota. En uno de los gestos más chulos del título, si quieres ver el hoyo sólo debes ponerte la mano sobre los ojos a modo de visera y la cámara se acercará hasta el agujero. Puedes cambiar de palo con la voz.

Dardos

Cuesta un poco coger el tino, de forma que a veces tienes que tener la mano justo delante de la cara, lo que te impide ver bien la diana, y debes afinar mucho el movimiento de lanzar o el punto de mira que habías ajustado desaparecerá, aunque al rato ya sabrás bien cómo lanzar. Menos afinado parece el minijuego Pinchadardos, en el que el dardo a veces da un salto al llegar al globo que es su objetivo.

Tenis

Es uno de los juegos en los que hay que hacer movimientos menos realistas. Toma un poco de práctica controlar el saque. Aunque tú muevas las dos manos juntas el avatar sólo lo hará con una, y en ocasiones un revés tuyo aparece en pantalla como una volea.

Esquí

Al contrario que en los dardos, es muy intuitivo y responde sin problemas. Consiste en pruebas de eslalon; no pasar por las puertas penaliza (y hacerlo por todas es un logro) y si saltas en el momento oportuno ganarás en velocidad. A movimientos amplios, más potencia.

Igual que ya sucediera el año pasado, Kinect Sports constituye una buena opción para pasar el rato en solitario o con alguien; y el juego online puede lleva a ser realmente competitivo (sobre todo porque ves los movimientos con los que tu rival celebra su victoria a tu costa). Incluso es recomendable para quienes buscan gastar unas cuantas calorías –el juego te va indicando el consumo todo el rato-. Pese a que algunos de los deportes es raro que despierten afición en España, sí ha logrado el estudio hacerlos accesibles y entendibles. Hubiera sido mejor que no se perdiera cierto toque de precisión en el camino, pero sin duda el juego sabe aprovechar como pocos las capacidades de Kinect.