Análisis de Medal of Honor Airborne (PS3, Xbox 360, PC)

En los seis niveles del juego visitaremos Italia, Francia, Holanda y Alemania. Tomaremos parte en la invasión de Sicilia y en la conquista de la península itálica, facilitaremos el desembarco de Normandía, participaremos en el fiasco de la operación Market Garden y lideraremos el asalto final a Alemania ya entrado 1945. A lo largo del juego estaremos en la piel de Travers, un soldado de la unidad aerotransportada, al que los otros soldados, anónimos, se referirán en ocasiones durante el juego –"¡Han herido a Travers!". "¡Vamos, Travers!"- y el narrador al terminar la misión. Sin embargo, la historia no asume un papel tan importante como en anteriores juegos de la saga o en otros títulos similares, simplemente hace de componente para hacer algo más creíble la acción.
El hecho de que el juego tenga seis niveles hace, de hecho, que cada uno de ellos sea muy importante y que un nivel flojo pueda estropear considerablemente la experiencia en general. Afortunadamente no es éste el caso en Medal of Honor Airborne. Los seis niveles son interesantes y están muy bien planteados, aunque subjetivamente los que más nos han gustado son los urbanos, aquellos en los que tenemos libertad para saltar en un tejado o meternos por las habitaciones una cosa y así intentar emboscar a los alemanes. En cualquier caso, la mezcla de entornos es acertada y el juego, aunque contando solo con seis niveles, tiene una duración considerable y, lo que es más importante, resulta una experiencia consistente.

A nivel gráfico Medal of Honor Airborne simplemente cumple, sin establecerse como una de las cumbres de Xbox 360 o PC pero sin decepcionar. Destaca el gran tamaño de los niveles y la cantidad de detalles en ellos, pero el resto de los elementos del juego están a un nivel decente o notable, sin destacar sobremanera dentro de los respectivos catálogos. Los escenarios no se modifican en tiempo real, y las explosiones son todas muy parecidas entre sí. El juego cuenta con algunos detalles interesantes, como la deformación de la mira del rifle de francotirador o algunas animaciones de muerte, pero el apartado gráfico, sin ser malo en absoluta, es la parte floja del juego. Quizás el hecho de ser inicialmente un desarrollo entre generaciones haya influido en este aspecto.
El apartado sonoro sigue al altísimo nivel de Medal of Honor y de las producciones de EA en general. La música es tan épica como acostumbra a ser en este hermano videojueguil de Salvar al Soldado Ryan, y los efectos de sonido son muy variados y dependen de la posición del enemigo que nos dispara, por ejemplo; las voces son, como es de esperar, completamente en castellano, con un buen doblaje y los respectivos acentos. Destacan además detalles como la propaganda alemana, que oiremos a través de los altavoces en ciertas misiones.
Complementando el modo para un solo jugador, de cierta duración aunque no mucha rejugabilidad -pues esa es la otra cara del gran tamaño de los niveles-, Airborne cuenta con un multijugador bastante estándar salvo por el hecho de permitir que las tropas aliadas salten al campo de batalla en paracaídas. Hasta doce jugadores podrán participar en varios modos de juego, como deathmatch o deathmatch por equipos, destacando entre ellos el modo de objetivos, contando con la misión de capturar tres banderas en cada nivel.

Medal of Honor Airborne es un juego de acción en primera persona sólido y un gran comienzo de la saga en la nueva generación; probablemente es también el mejor juego de la saga en muchos años, innovando en lo del salto en paracaídas, lo que le da al juego una gran frescura entre tanto juego de acción basado en la segunda guerra, y contando con un buen diseño de niveles que esperamos que, haya saltos o no, se mantenga en sucesivas ocasiones. Solo un apartado técnico no demasiado brillante y los fallos en la inteligencia artificial, que acaban haciendo el combate algo repetitivo en ocasiones, empañan un poco la experiencia. Por lo demás se trata de una compra muy recomendada para los aficionados a la acción.

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