Análisis de Le Tour de France 2012 (PS3, Xbox 360)

El Tour de Francia es todo un referente para el mundo del deporte. No es solo una competición más para los amantes del ciclismo: es la cita de referencia. Los más veteranos y aficionados, conoceréis y tendréis en alta estima -como nosotros en la redacción- a la saga de ciclismo "Pro Cycling Manager". Durante varios años y entregas, han sabido escuchar a los usuarios y enfocar sus títulos y juegos a la comunidad en PC. Entrega tras entrega, han sabido pulir y mejorar un producto que a día de hoy se nos antoja casi excelente en PC, y tras el éxito del anterior Tour de France, también en consolas. Y es que Cyanide y Focus Home Interactive, han sabido trasladar la experiencia base de su saga, a las consolas de Sony y Microsoft.

Y tiene mérito. El año pasado, Le Tour de France para Xbox 360 y PS3, consiguió, tras mucho esfuerzo, llevar a ambas máquinas un deporte tan minoritario y maltratado como el ciclismo. Obviamente, y como pudisteis ver en nuestro análisis, faltaron ciertas cosas, y no se terminaron de pulir ciertos aspectos para hacer más redonda y divertida la experiencia. No era mal juego, pero tampoco especialmente bueno. Ahora, con el Tour de 2012 ya en juego, Cyanide y Focus Home Interactive lo vuelven a intentar, escapándose una vez más del pelotón y pedaleando de nuevo con vistas de conquistar la presente etapa. ¿Lo han conseguido?

Un concepto de nuevo simplificado, aunque con más opciones

Lo primero que hay tener en cuenta, sobre todo si hay algún despistado, es que el presente Le Tour de France 2012 es una versión simplificada, más enfocada a la simulación que a la gestión, del reconocido juego "Pro Cycling Manager Season 2012". Mientras que en la versión de PC, podemos plantear una estrategia durante una temporada entera, o gestionar desde el más mínimo detalle a un equipo, la experiencia de Le Tour de France 2012 -como también lo era en la edición anterior- es bastante más directa y enfocada la competición. Al principio creeremos estar jugando a una versión "light" de su versión para PC, pero al cabo del tiempo nos daremos cuenta de que son juegos distintos, basados en dos plataformas diferentes y enfocados a una audiencia opuesta -pese a que tengan en común su afición por el ciclismo-.

Nada más arrancar, y tras vernos una pequeña introducción donde se nos resaltarán algunas de las etapas más famosas y reconocidas del gran Tour de Francia, nos daremos cuenta de lo parco y poco completo en opciones que se nos presenta el juego. En este Le Tour de France 2012 no encontraremos demasiados modos de juego, ni opciones de configuración, pero sí interesantes añadidos con respecto a la edición anterior. Así, disfrutaremos del modo principal -que nos llevará por las diferentes etapas del Tour- y este año sí, de un modo multijugador bastante simple pero entretenido, que intentará llenar y acallar las carencias y críticas de los usuarios a la versión de 2011, así como de las salas de trofeos y el tutorial. Además, se nos ofrece una interesante opción de edición de bases de datos, que nos permitirá no solo crear o editar un ciclista existente, también modificar y cambiar los nombres de los equipos, así como las equipaciones, los que nos brindará dosis de libertad extra para perfilar esos equipos y corredores sin licencia oficial.

Estrategia -sudor y lágrimas- para conseguir el Maillot Amarillo

Le Tour de France 2012, ofrece la posibilidad de jugar el Tour al completo, o hacerlo a nuestro antojo, escogiendo etapas y recorridos concretos en el caso de que prefiramos echar una partida rápida y directa. No pasará mucho tiempo hasta que escojamos equipo, teniendo a nuestra disposición alguno de los más importantes -como los conocidos Saxo Bank, Movistar Team o el Euskaltel-Euskadi-, que nos brindarán un acceso rápido a la victoria de etapa, proporcionándonos buenos corredores y más posibilidades de ganar. Y es que, y esto hay que tenerlo claro, comenzar con un equipo fuerte detrás nuestro nos otorgará mejores prestaciones y la suficiente fuerza como para hacernos campeón y líderes en la general al poco tiempo, cosa que los amantes de los retos, rechazarán. Los que quieran una experiencia más dura, obviamente, deberán buscar equipos y conjuntos más humildes, con ciclistas más corrientes y con menos "rendimiento" o capacidades físicas. Pero pese a ello, la experiencia global en cuanto a dificultad de este Le Tour de France 2012, se nos antoja lo suficientemente alta como para hacérnosla pasar "canutas".

En la edición de 2012 se han añadido ciertos componentes en la IA de los corredores -tanto compañeros de equipo como contrincantes y rivales- que hacen las etapas y la competición más entretenida y difícil. Cyanide Studios ha revisado por completo la IA de los ciclistas, que ahora parecen "leernos" las intenciones. Esto otorga de una nueva dimensión a las escapadas, que deberán planificarse con atino con nuestros compañeros de equipo, a los que ahora, podremos dar órdenes más concretas. La estrategia en las carreras cobra un protagonismo total, permitiéndonos ser pacientes o impulsivos en función de la etapa y brindando incluso, libertad total a la IA en cuestiones de liderazgo. Entre las opciones disponibles están las de proteger al líder -escudarlo y ayudarlo a subir un puerto de montaña, por ejemplo-, la de pedir ayuda a nuestro equipo o a un conjunto rival mediante un sistema de alianzas, reclamar apoyo si tenemos un desgraciado accidente -como un pinchazo-... Todas ellas -hay algunas más- están muy bien integradas y aportan variedad al devenir y al desarrollo del juego. Pero hay más.

Como decíamos, Le Tour de France 2012 ha revisado la IA de los corredores, que ahora parecen más humanos. ¿Qué supone esto? Pues que habrá ciclistas que se cansarán mucho más rápido y otros que responderán a nuestros achaques, mientras que algunos serán verdaderas máquinas biológicas, desafiándonos continuamente etapa tras etapa. De hecho, cuando llevamos algunas etapas a la espalda, sabremos perfectamente qué corredores aguantan más, cuales por el contrario son más débiles o qué tipos de puntos fuertes y débiles tienen cada uno de ellos. Otro añadido interesante en la introducción de las provisiones de comida -plátanos, barritas y bebidas energéticas o manzanas- que nos aportarán energía extra con la que nutrir a nuestro corredor en momentos concretos. Con estos cambios, gran parte de la frustración de la edición pasada se desvanece, dando como resultado una experiencia jugable más grata de lo que esperábamos en un principio.

Eso sí, el control sigue prácticamente idéntico al de la anterior edición, conservando gran parte de los esquemas vistos. La interfaz recibe algunos cambios, pero se mantiene la esencia. Ahora tenemos un pequeño mapa a la izquierda que nos informa del recorrido de la etapa, con sus puertos de montaña, sus descensos y sus desniveles, así como las habituales distancias hasta la meta o el maillot amarillo o los puntos de control. La velocidad y la energía también aparecen reflejadas, así como la orientación. Una vez más, y como ya vimos en la edición 2011, nuestro corredor irá avanzando de forma automática, y dependeremos de las barras de energía y las pulsaciones reiteradas de determinados botones para conservar la energía, frenar, defendernos y protegernos del viento o realizar un sprint. Podemos manejar el manillar de la bici, inclinándonos a izquierda o derecha y así tomar y rectificar la dirección, simplificándonos bastante el trabajo a realizar.

Leído y comentado de esta manera, el control general sobre el ciclista quizás parezca aburrido, y es que los que esperéis sprints o carreras veloces, rápidas y plagadas de adrenalina, podéis esperar sentados. Aquí la mayor parte del juego estaremos realizando o pensando estrategias, conservando energía, intentándonos evadirnos del pelotón como un escapado más o esperando el relevo de nuestro compañero -en estos aspectos entra en liza la nueva IA y las estrategias de equipo introducidas en la versión 2012 del juego-, con lo que la simplificación del control nos ayudará y mucho a estar pendientes de otros parámetros a tener en cuenta de cara a la victoria de etapa -o si lo hemos hecho bien, del Tour-. Cada etapa es un universo propio, con lo que deberemos tener en cuenta el corredor que escogemos para cada situación -¿Necesitamos un escalador para una etapa de montaña o un buen corredor con capacidad de esprintar para obtener la cabeza y el mejor tiempo en un recorrido llano?-, ya que como os podéis imaginar, los fallos, sobre todo si estamos jugando el Tour al completo, pueden constarnos más de un disgusto a la larga.

La duración de cada etapa se ha revisado, siendo algo más largas y correspondientes a sus homólogas reales que en la edición de 2011, dejando otra vez más las secciones más largas y monótonas, a la simulación. De todas formas, y pese a que reconocemos que el control funciona bastante bien dentro del planteamiento del juego y sus propósitos, pensamos que no hubiera estado de más incorporar una suerte de "control para expertos" donde tuviéramos que pedalear de una forma más realista -manteniendo el equilibrio de mejor manera- y donde la experiencia ir a lomos de una bicicleta de competición fuese más "dura". Otra de las novedades introducidas, el modo multijugador y los rankings online, nos parece también metida con calzador y adolece más a las presiones de los usuarios durante el año pasado que a un interés real de los desarrolladores por enfocar su juego a las mieles del juego en comunidad en PS3 o Xbox Live.

Un recorrido visual por una Francia algo más atractiva

No os sorprenderemos si os decimos que la edición del año 2011 era un juego bastante justo a nivel gráfico, quedando muy por debajo de lo que debería ser un título de la presente generación. Tampoco os sorprenderemos si os decimos que, pese a los cambios introducidos, la versión de 2012 no es nada del otro mundo. Le Tour de France 2012 es un juego que parece haberse quedado a medio camino entre la generación anterior y la actual, ofreciendo un contraste visual un tanto extraño de sopesar y entender. Sí, tiene aspectos destacables y cuidados, y otros, dejados y poco pulidos. La mejora con respecto a la anterior entrega es visible -todo luce mucho más nítido y brillante-, pero sigue sin convencernos del todo.

Los recorridos reales se han cuidado hasta el más mínimo detalle, reflejando lugares con exactitud casi milimétrica -habrá parajes, pequeños poblados y poblaciones muy similares a sus homólogos reales-, algo que los más puristas y aficionados al ciclismo agradecerán. Las etapas de montaña vuelven a ser las más lustrosas, con cantidad de árboles y vegetación a ambos lados de la pista, enormes macizos montañosos que nos regalarán sombra y un montón de detalles más. El público, elemento poco reconocible e interactivo en el juego del año pasado, ahora es más activo, animándonos cuando nos acercamos con diferentes banderas -de todos los países posibles- y maillots, arrojando cierto toque "televisivo" necesario para transmitir el consabido realismo. Y no, por más que lo hemos intentado, no hemos conseguido caernos al chocar con alguno de estos espontáneos, ya que se apartan convenientemente a nuestro paso. El público adyacente a los lados de la carretera, también tocará los cláxones de sus vehículos y nos gritará a viva voz, en un detalle, que para ser sinceros, nos ha encantado.

Los ciclistas están mucho mejor modelados. Ahora gozan de mayor definición en sus equipaciones y bicicletas, y parecen más realistas. Las animaciones prosiguen la herencia casi robótica de la versión anterior, aunque nos da la ligera impresión de que se han añadido algunas animaciones más de transición en determinados momentos en pos de buscar un comportamiento más fluido y creíble. De todas formas, seguiremos viendo forzado y casi automático el pedaleo de algunos compañeros, así como los consabidos giros en las curvas -un verdadero espectáculo en el peor sentido de la palabra-. Sí, el juego mueve a una gran cantidad de corredores, así como unos escenarios enormes, ¿pero de qué sirve cuando te das cuentas de que los ciclistas "flotan" sobre el asfalto? Es un fallo que ya estaba presente en la entrega de 2011 y que sigue haciendo acto de aparición en esta versión anual. En líneas generales, el motor gráfico parece haber sido retocado -los juegos de luces y sombras son mucho mejores, por ejemplo-, pero no en demasía, y aunque Le Tour de France 2012 tiene aspectos en los que parece algo mejor, prosigue heredando algunos defectos que estropean -y mucho- el resultado final del juego a nivel técnico. El juego viene en versión original con subtítulos y textos en castellano, y ofrece una pista sonora musical, que si nos permitís un consejo, mejor será desactivar.

Conclusiones finales

Le Tour de France 2012 es un juego hecho para los amantes más acérrimos del ciclismo. Jugablemente podrá parecer simple para muchos jugadores, pero lo cierto es que cada etapa y cada competición, es todo un reto basado en la estrategia, el uso de nuestras fuerzas y la suerte. Ganar no es fácil, y eso, se agradece. Cyanide Studios ha perfilado y añadido ciertos elementos interesantes, como el potente editor o la mejorada IA, asentando unas buenas bases de cara al futuro. A nivel técnico no es ningún prodigio, y aunque visualmente parece haber ganado algunos enteros, sigue arrastrando deficiencias técnicas que lastran los aspectos positivos. Entonces, ¿estamos ante un buen simulador? Creemos que la palabra exacta para definirlo es "correcto". Ni más, ni menos. Es correcto a nivel jugable, correcto en cuanto a opciones -sobre todo con respecto a la versión 2011- y correcto en lo técnico. Entretenido, -y divertido siempre y cuando disfrutemos de este castigado deporte-, Le Tour de France 2012 no puede compararse a la versión de PC, pero ofrece una experiencia correcta en nuestras consolas.