Análisis de Dragon Ball Z Budokai HD Collection (PS3, Xbox 360)
Como bien sabéis los fans de Goku y compañía, cada año por estas fechas se lanza un nuevo Dragon Ball, y en los últimos tiempos, con el salto a la alta definición, los juegos basados en la obra de Akira Toriyama no están pasando por su mejor momento. Desde Dragon Ball Z: Budokai Tenkaichi 3 en 2007 para PlayStation 2 y un año después para Wii, no hemos podido disfrutar de un gran título que haga justicia a tan mítico manga y serie de animación.
Este año de hecho Dragon Ball vuelve por partida doble, aunque curiosamente ninguna de las dos propuestas se puede considerar una nueva entrega con todas las de ley, la que se supone llegará en 2013 con fuerzas renovadas, un proyecto que Namco Bandai se guarda muy en secreto, y que esperemos, por fin cumpla con las expectativas. Hace unas semanas os hablamos de Dragon Ball Z para Kinect, que recicla lo visto el año pasado en Dragon Ball Z Ultimate Tenkaichi –cinemáticas, animaciones, gráficos- e incluye una limitada y mejorable jugabilidad que te obliga a jugar Kinect, el periférico de control por movimiento de Xbox 360. Un producto hecho con pocas ganas, no todo lo preciso que debería en lo jugable, y que además incluye pocos modos y posibilidades, y ni siquiera la posibilidad de poder enfrentarse dos jugadores.
Ahora llega Dragon Ball Z Budokai HD Collection, una recopilación en HD de Dragon Ball Z: Budokai 1 y 3, que salieron originalmente en PlayStation 2 en los años 2002 y 2004 respectivamente.
La trilogía que antecedió a la saga Dragon Ball Z: Budokai Tenkaichi y sus tres juegos, que seguramente también nos acabarán llegando en un nuevo recopilatorio. Como podéis ver, de manera sorprendente Dragon Ball Z: Budokai 2 no se incluye en el recopilatorio, una decisión difícil de entender.
Según palabras textuales de Namco Bandai, la explicación es que "cuando miras a los tres juegos, el uno y el tres son juegos de lucha más puros. El dos es un juego de lucha, pero también introduce otros elementos en la jugabilidad que rompen un poco con los aspectos habituales del género. Decidimos no incluirlo en el recopilatorio porque el primer juego estableció la serie Budokai y la definió, mientras que el tercero fue la resolución final de la saga". En fin, no sabemos si os convence la explicación, ya que aunque Dragon Ball Z: Budokai 2 sea un tanto atípico y el peor de los tres, al menos debería haber estado como curiosidad.
Las colecciones en HD se han puesto de moda en los últimos años, las estamos recibiendo de todo tipo y cualquier clásico de la anterior generación o ya ha vuelto en alguno de estos recopilatorios, o es muy posible que lo haga en próximas fechas. Un producto criticado por algunos y bien recibido por otros, una ocasión para volver a disfrutar de grandes juegos con su aspecto gráfico adaptado a los televisores en alta definición, o una oportunidad para disfrutar de un clásico que por el motivo que fuera, dejaste pasar en su día.
Unas colecciones realizadas con mayor o menor fortuna, con algún caso polémico que incluso estropeaba en algunos aspectos el juego original – Silent Hill HD Collection -, otras veces con ausencia de contenidos inexplicables, y en otras ocasiones, las menos, incluso con alguna novedad o añadido. En el caso de Dragon Ball Z Budokai HD Collection nos encontramos ante una remasterización en HD que cumple con el mínimo exigible, pero que no incluye ninguna novedad, más allá de los logros o trofeos obligatorios en cualquier juego de Xbox 360 y PlayStation 3.
Dragon Ball Z Budokai fue el estreno de la saga en PlayStation 2 desarrollado por Dimps, un juego que un año después también llegaría a Nintendo GameCube. Incluye 23 personajes extraídos de la mayoría de las sagas de Dragon Ball Z que tendremos que ir desbloqueando, como siempre desde la llegada de Raditz, Vegeta y Napa a la Tierra hasta la muerte de Célula. Incluye distintos modos de juego, entre ellos el interesante e imprescindible modo Historia, narrado a base de cinemáticas realizadas con el propio motor gráfico del juego, con muchos combates y algunos minijuegos; Duelo –un modo versus-, Practicar, y Encuentro mundial, disputando el conocido Torneo mundial de las artes marciales en distintas dificultades.
Como juego de lucha no ha envejecido del todo bien, y más teniendo en cuenta que hemos vivido en los últimos años un auge del género, con una gran cantidad de juegazos de lucha tanto en dos como en tres dimensiones. Puñetazo, patada, lanzar ondas explosivas de Ki y ponerse en guardia, únicamente cuatro botones para una jugabilidad demasiado sencilla, en la que pone su punto de complejidad las diferentes técnicas, los ataques especiales, que vamos adquiriendo poco a poco en forma de cápsulas, y que podemos equipar a nuestro antojo.
Dragon Ball Z Budokai 3 es evidentemente mucho mejor en todos los sentidos que la primera entrega, tanto por el sistema de combate, como por la cantidad de luchadores y sus gráficos. Incluye modo Duelo, Torneo mundial y Práctica al igual que el primer Budokai, y un modo historia titulado Universo Dragón. En este modo primero elegiremos uno de los personajes disponibles desde el inicio –Goku, Yamcha, Tenshinhan, Piccolo, Krillin, Gohan – y no solo nos limitaremos a disputar combates y visualizar las ilustraciones que nos narran la historia, ya que volando exploramos un mapa del mundo tridimensional, con distintas localizaciones y secretos. Se incluyen eventos de las películas y hasta de Dragon Ball GT, y tras cada combate conseguimos puntos de experiencia y podemos mejorar distintos parámetros, así como subir de nivel, un toque rolero o de aventura que le sienta bastante bien.
El sistema de combate es más complejo y profundo respecto al primer Budokai, pese a mantener el mismo esquema de cuatro botones, añade las teletransportaciones y el modo Hyper, que nos permite realizar los ataques Dragon Rush y los movimientos finales. En general como juego de lucha se siente mejor, más ágil y rápido, con una mejor respuesta en los controles, siendo también mucho más espectacular gracias a todo tipo de ataques cinemáticos. Con un total de 42 luchadores, dobla prácticamente en personajes al primer Budokai.
En lo que al apartado gráfico se refiere, hay que decir que el primer Budokai ya fue en su día un juego con unos gráficos desfasados, pero la verdad es que el salto a la alta definición le sienta bastante bien. Esto ocurre casi con cualquier juego colorido, que intente imitar el aspecto de un manga o un anime, y cuyos modelados sean muy simples y sin excesivos detalles, en HD simplemente mejora, con unos colores más vivos, y sin que salgan defectos a relucir que no percibimos en la versión original.
Y lo mismo se puede aplicar a Budokai 3, aunque mucho más vistoso al utilizar la técnica del cell shading, que puso tan de moda por aquellos años entre otros The Legend of Zelda: The Wind Waker, y que se luce más al incluir espectaculares cinemáticas en los ataques especiales. Ambos se mueven muy fluidos como era esperar, y como único punto negro los menús se muestran con dos marcos a los lados, respetando el formato de imagen original 4:3, algo que no ocurre en los combates que se muestran en unos perfectos 16:9. Un detalle anecdótico por otra parte, ya que no molestan para nada estos marcos al navegar por los menús.
El primer Budokai solo incluye voces en japonés, las del reparto original de la serie, y la tercera entrega además de japonés también incluye audio en inglés, contando ambos con subtítulos en castellano. Se incluyen 43 trofeos o logros en total, para aquellos que quieran sacarle el máximo provecho a cada juego, y como ya hemos señalado no se incluye ninguna novedad más. Por ejemplo se podría haber incluido un modo versus online, pero no hay ninguna opción relacionada con internet, ni combates ni marcadores.
Solo recomendado para los más nostálgicos
Se estuviéramos hablando de un recopilatorio de la saga Tenkaichi, sobre todo por su tercera entrega, se lo recomendaríamos a nuevos jugadores que nunca hayan podido disfrutar de un buen juego de Dragon Ball. Pero estos Budokai, hoy en día, no dejan de ser dos juegos de lucha correctos, solo recomendamos para los fans del manga o anime. La recopilación cumple en el apartado técnico, adaptando acertadamente ambos títulos a la alta definición, pero en cambio como colección patina un poco, al no incluir la segunda entrega de manera incomprensible. Con la única novedad de los logros y trofeos, y el salto a la alta definición, nos parece un producto solo recomendable para nostálgicos, que quieran rememorar los buenos ratos que pasaron con estos dos juegos hace unos años.