Análisis de James Bond 007: Agente en Fuego Cruzado (PS2)

¿Qué es lo que hace que una persona nunca reciba una herida mortal a lo largo de casi 40 años y 19 películas, cuando se ha enfrentado a todo tipo de malvados megalómanos y a miles de sicarios bien entrenados y armados hasta los dientes? En una palabra: el Mojo. James Bond lo tiene; Moneypenny lo sabe, M lo sabe, cada una de las "chicas Bond" lo sabe e incluso Q lo sabe. Combinando el casi infinito Mojo del más popular agente secreto británico con su institiva capacidad para destrozar propiedades inmobiliarias, las películas del personaje creado por Ian Fleming llevan años cosechando éxitos. Primero fue Sean Connery quien encarnó al agente al servicio de su majestad durante unos cuantos filmes, y tras una sóla película de George Lazenby, Roger Moore cogió las riendas del personaje, protagonizando otras más. Retirado Moore de su papel de Bond, Timoty Dalthon protagonizó un par de películas, tras las cuales hubo un pequeño parón en la saga hasta la llegada de Goldeneye, en la que Pierce Brosnan volvía a hacer uso de todas sus reservas de mojo para salvar a Gran Bretaña del caos monetario. Pierce Brosnan lleva ya tres películas haciendo de Bond, y tras la cuarta, el personaje tendrá que buscar un nuevo dueño.

Precisamente he resaltado Goldeneye porque fue esa película la que escribió con letras doradas el nombre de Bond en la historia del videojuego. Rareware cuajó un grandísimo juego en primera persona que siempre estará en el recuerdo de los usuarios de Nintendo 64, y tras el éxito del juego, Electronic Arts –poseedora de la licencia- intentó repetirlo con juegos basados en las dos últimas películas de Bond, que no lograron ni de lejos hacerle sombra a Goldeneye. Sin embargo, Electronic Arts decidió aprovechar la licencia al máximo y no esperar a la próxima película de Bond para explotar el filón, y tras un 007 Racing no demasiado brillante se estrena en PlayStation 2 con 007: Agente en Fuego Cruzado, un título que combina acción en primera persona con conducción arcade y una extraña mezcla entre ambas cosas que podría definirse como "acción en primera persona guiada".

La historia del juego nada tiene que ver con ninguna de las películas, aunque claramente toma elementos de muchas de ellas. La historia del juego es un mero pretexto para presentar la acción, pero está bien contada a base de secuencias cinemáticas generadas por el motor del juego y secuencias CG. Una agente de la CIA en peligro, una extraña empresa dirigida por una mujer bastante loca que quiere crear un ejército de clones para dominar el mundo, y Bond en medio de todo el cotarro con la suficiente munición para iniciar varias veces una tercera guerra mundial. Como iba diciendo antes, la acción del juego está dividida en tres partes: Tenemos por un lado las misiones en primera persona, que son iguales a las del resto de FPS, pero con un mayor uso de los items (los famosos gadgets de Bond); en la parte "motorizada" tenemos las de conducción, al estilo del juego Spy Hunter, y las de acción dirigida, que mezclan la dinámica de un juego de pistola con la de un FPS. Las fases en primera persona consisten en la consecución de unos objetivos, que normalmente pasan por abrirse camino (con la autoridad del mojo) desde el inicio hasta el final del nivel acabando con los enemigos. No hay mucha profundidad en esta modalidad, pues casi siempre hay solo un camino a seguir y por decirlo de alguna manera está marcado con luces de neón. Muchas veces avanzar pasa por utilizar uno de los "Gadgets de Q", tales como el laser, el garfio, el decodificador y algún otro; no hay demasiado espacio para salirse del camino, ya que los niveles son terriblemente lineales y no tendremos que pensar mucho lo que hacer ya que como decía antes todo está bien señalizado. Cuando veamos en un muro una rejilla grande y muy poco decorativa sabremos que ha llegado el turno de utilizar el garfio. Cuando veamos un candado enorme que cierra una entrada advertiremos instantáneamente que puede ser fundido por el laser de Bond, y así sucesivamente. Algo más de juego tienen las llamadas "acciones 007", un gran acierto por parte de los desarrolladores del juego. Hay muchas formas de matar a los enemigos, muchas formas de llegar a un lugar y muchas formas de escapar de unos helicópteros; sin embargo, Bond sólo lo haría de una forma, y si nosotros la simulamos seremos recompensados. Si podemos acabar con los enemigos haciendo explotar un barril cercano a ellos, ese será el camino a seguir, por poner un ejemplo. Abundan en el modo en primera persona, pero también están presentes en los otros modos. Aparte de las misiones en 1ª persona, como ya decíamos, tenemos las misiones de conducción y de "disparo guiado". Las misiones de conducción son simplemente sensacionales y se echan en falta más de ellas. Conduciremos por un mapeado no lineal peleando huyendo/combatiendo con los sicarios de turno, recogiendo las armas para nuestro coche y utilizándolas. Además, los desarrolladores han introducido eventos especiales –saltos, en su gran mayoría- en ciertos sitios del escenario. Por ejemplo, en la fase de Bucarest nos persiguen varios helicópteros, y derriban un puente con misiles; nosotros saltaremos por una pequeña rampa que queda, y llegaremos al otro lado del puente. Por último, las misiones de disparo guiado son tal vez las más flojas de todo el título. Nuestro vehículo andará sólo y nosotros sólo tendremos que preocuparnos de disparar a los enemigos, y abrirnos camino. Tendremos varias armas para elegir, algunas del propio vehículo, pero estas misiones terminan haciéndose repetitivas. Finalmente, 007: Agente en Fuego Cruzado incluye un muy interesante modo multijugador para hasta cuatro jugadores (con multitap) al que si que se le saca mucho partido, y acaba resultando terriblemente adictivo y divertido. También es preciso decir que por cada misión nos otorgarán una medalla, dependiendo del número de puntos que consigamos, y que con las medallas de oro obtendremos extras como la pistola de oro, munición infinita o el Lotus Esprit; con las medallas de platino obtendremos extras para el modo multijugador. A nivel gráfico 007: Agente en Fuego Cruzado está muy por encima de la media, con unos escenarios grandes, un muy buen modelado y animación de los personajes y un framerate de 60 fps casi siempre constante. Los efectos especiales como las explosiones, o la iluminación, también están a la altura de las circunstancias, y el juego en general presenta un aspecto gráfico notable, muy limpio y sin ningún fallo. En cuanto a James Bond, suponemos que no tenían licencia de Brosnan para reproducirlo, ya que Bond parece exactamente una mezcla entre Brosnan, Connery y Moore, y resulta muy creible. El aspecto musical del juego parece el de una película de Bond, pues la música que sonará durante la mayor parte del juego es la que todos conocemos. Cuando hagamos una acción especial o cumplamos un objetivo sonará estruendosamente el "tara, tará, tarará" de James Bond, eclipsando a cualquier otro sonido que pudiese haber en ese momento. Puede gustar, o puede molestar en algunas ocasiones; depende de cada uno. En cuanto a los efectos de sonido, están todos a un buen nivel. Las voces están dobladas al castellano y no tienen tampoco ninguna queja. El sistema de control de 007 en primera persona es el clásico utilizado en los juegos de este tipo, usando los dos analógicos para moverse y mirar, y los otros botones para saltar, disparar, etc. Es bastante intuitivo, pero falla en las posibilidades de configuración: sólo hay cuatro tipos de control, y ninguno de ellos se adaptaba, por poner un ejemplo, al que yo quería (analógico izquierdo para mirar y girar, derecho para el movimiento). Salvo esto, el control es fiel y la jugabilidad en primera persona bastante buena, aunque como ya he dicho extremadamente lineal y sencilla. En el modo de conducción el sistema de control es sencillo, con el analógico izquierdo para controlar el automóvil, los botones frontales para acelerar y frenar y los laterales para las armas. Nunca presenta problemas. James Bond 007: Agente en Fuego Cruzado resulta ser un buen juego de Bond, que combina ideas muy buenas con alguna que otra carencia. Tiene el feeling de las películas, con un Bond rezumante de Mojo. (Cosas como "¿Cómo podré agradecértelo?" "Ya encontraremos la forma"), acción trepidante, muchos disparos y una historia discreta. Sin embargo, las carencias en el modo para un solo jugador, como la extrema sencillez de las misiones en primera persona, la monotonía de las guiadas y una duración algo insuficiente hacen que un juego técnicamente muy bueno y bastante prometedor se quede en el grupo de los "buenos, sin más". Un modo multijugador muy divertido y un modo para un solo jugador que tiene momentos memorables pero otros no tanto. James Bond volverá... como siempre.