Análisis de Tetris 3DS (Nintendo 3DS)

Si tuviésemos que escoger un videojuego de la categoría puzles, probablemente Tetris se llevaría la palma. Desde que se lanzó a la fama en la vetusta GameBoy allá por 1989, no ha habido plataforma electrónica que no haya recibido una versión de este título, desde consolas hasta todo tipo de sistemas operativos para PC (Windows, Linux, iOS…), pasando por teléfonos móviles, calculadoras gráficas, PDAs, reproductores multimedia portátiles, recreativas de salón, y toda suerte de cacharros con capacidad de mostrar gráficos en una pantalla.

No es de extrañar, por tanto, que cualquier consola que sea lanzada al mercado reciba al menos una versión de este juego, y 3DS no iba a ser la excepción.

Sin embargo, tanta diversificación provoca que uno pueda jugar con Tetris de una manera rápida e incluso gratuita, por lo que Hudson Soft, los desarrolladores de esta versión, se las han tenido que ingeniar para crear un Tetris lo suficientemente atractivo que justifique los 30 euros que cuesta la tarjeta para 3DS, y es que vivir de glorias pasadas hoy en día no sale rentable, menos en los tiempos de crisis que corren.

Desde Rusia con diversión.

Lo primero que llama la atención es la gran cantidad de modos de juego que atesora este título, por lo que se asegura que el jugador encontrará variedad suficiente para que encuentre, si no todos, unos cuantos que se adapten a su gusto. En el menú principal encontraremos acceso a varios submenús que a su vez muestran los diferentes modos de juego. El primero de ellos se trata de Modos destacados, donde encontraremos las maneras de jugar más clásicas, como Maratón donde nuestra misión será la de hacer líneas y más líneas hasta que los tetriminos alcancen la parte superior de la pantalla, Tetris vs. IA en el que competiremos contra la máquina, la cual veremos representada por diferentes versiones del archiconocido personaje Bomberman según vaya aumentando la dificultad.

En el modo Fiebre se juega en un campo estrecho donde deberemos completar todas las líneas que se puedan en un tiempo de 60 segundos, recolectando monedas que luego se podrán intercambiar por objetos especiales que se seleccionarán más tarde antes de comenzar la partida; estos objetos tendrán efectos diferentes como rellenar espacios abiertos entre minos de la matriz o volver todos los bloques del mismo color; resaltar que cuando juguemos en modo spotpass los objetos serán diferentes y tendrán otros efectos como por ejemplo bombas que al explotar eliminan los minos cernanos. El modo Supervivencia es similar al Maratón, con la salvedad de que nuestro campo de juego es más estrecho y van subiendo lentamente líneas de penalización.

El siguiente submenú de juego es el Modo Party, lugar en el que los desarrolladores han dado rienda suelta a su imaginación para mostrarnos nueve diferentes formas de utilizar los minos, algunas de ellas realmente curiosas. El primero de ellos es Puzle, en el que tenemos un modelo creado con tetriminos que podemos visualizar en la pantalla inferior, y las piezas van cayendo de tal forma que hay que colocarlas de la misma manera. El enemigo es el tiempo, y tenemos la ventaja de que aunque fallemos en localizar una pieza de manera correcta, no quedará ahí esperando a que la eliminemos.

El modo Sombra nos muestra la sombra de una figura en la pantalla inferior que debemos ir rellenando con piezas. Si ponemos piezas de más contará negativo, y hay que ir con mucho cuidado de que no queden huecos libres porque entonces habrá que ir deshaciendo líneas hasta rellenarlo. Hay hasta 20 figuras, que van desde una casa hasta una ballena, y el resultado lo vamos viendo en 3D en la pantalla superior; sin duda uno de los juegos que más nos ha gustado. En Atracón veremos un muro que se nos va acercando que tiene huecos correspondientes a tetriminos. Al principio sólo tendremos que colocar dos piezas, pero poco a poco el número de huecos va aumentando, convirtiéndose en todo un reto en las fases más avanzadas. Otro de los modos originales es Escalador de torres, en el que tendremos que ir construyendo una escalera a base de tetriminos a un personaje para que llegue a lo alto de una torre circular que podemos rodear las veces que queramos.

En Bombliss pluss tenemos una pieza objetivo que deberemos destruir. Los tetriminos tienen bombas que podemos combinar para generar una gran explosión que destruya líneas de una vez, permitiendo combos bastante vistosos. El modo Corredor de etapas nos mete en una especie de juego de carreras en el que nuestro coche, un tetrimino, deberá recorrer 400 líneas de "pista" girando contínuamente para no tropezar. A menor tiempo empleado, más puntuación.

El modo Captura trata de rellenar unas estrellas que hay en una pantalla de dos caras con tetriminos del mismo color; al principio es un tanto lioso hacerse con el estilo de juego que propone, sobre todo cuando en el manual no se explica nada y el tutorial incluido en el juego no explica claramente cómo hay que proceder, pero a las pocas partidas uno se hace con la mecánica. En Modo Maestro los tetriminos caerán a su máxima velocidad desde el principio y nuestro objetivo es hacer tantas líneas como se pueda.

Las piezas tienen efecto deslizamiento de tal manera que si no quedan totalmente encajadas siempre tendremos cierto control girándolas hacia donde queramos, pero al mínimo despiste nos caerá la siguiente y la siguiente, estropeándonos totalmente nuestra estrategia. El último modo es Sprint, y el reto consiste en realizar 40 líneas lo más rápido que se pueda. En general estos modos nos han parecido muy divertidos, y salvo alguno en el que al principio no se tiene muy claro qué es lo que hay que hacer (Modo Captura), los demás son intuitivos y en las dos primeras partidas ya se tiene cogido el tranquillo y las estrategias generales a seguir.

Los programadores de Hudson Soft no han desaprovechado la oportunidad de realizar un par de juegos que utilicen la tarjeta RA incluida con la compra de la consola. Se trata de dos versiones de Maratón y Escalador con ancho de la pantalla estrecho y preparado de tal manera que no es complicado realizar combos y más combos. Cada cierto número de filas conseguidas el tablero por donde caen los tetriminos gira, obligándonos a cambiar nuestra postura para ver mejor las piezas. No es que sea la forma más original de jugar del mundo, pero sin duda es una buena excusa para desempolvar la tarjeta de realidad aumentada y ver cómo caen los ladrillos encima de nuestra mesa. Como no podía ser de otra manera en los tiempos que corren, también existen dos opciones para pelearnos contra otros jugadores, uno en modo local y otro vía internet.

Ambos permiten la utilización de objetos que previamente hayamos desbloqueado con las monedas en el modo Fiebre, lo cual redunda en cierta rejugabilidad al obligar a conseguir todos los objetos si uno no quiere verse de repente con sorpresas desagradables en forma de piezas que se mueven de una forma inapropiada o por ejemplo una niebla espesa que nos impide ver nuestro tablero. Para el modo de juego local sólo hace falta una tarjeta de juego, lo que facilita enormemente buenos piques entre amigos sin necesidad de que todos tengan su copia a mano. Vía wifi podremos competir contra otros jugadores de todo el mundo con los modos de juego Tetris mundial donde jugaremos contra una persona o contra siete dependiendo de si están activados los objetos o no, y Batalla vs. amigo en el que las reglas serán las mismas que antes pero contra gente que tengamos añadida a nuestra lista de amigos en la 3DS.

Destacar que cada vez que juguemos por internet seremos puntuados y pasaremos a formar parte de un ránking mundial. En la parte negativa nos encontramos con que hasta que haya ocho jugadores para competir no empezará la partida, y aunque mientras esperamos podemos ir entrenando haciendo más y más líneas, uno puede estar esperando minutos y más minutos sin tener una certeza o cuenta atrás que le indique cuándo va a empezar el duelo. Hubiese sido mejor un sistema más flexible que permita partidas entre menos jugadores sin esperar largos periodos de tiempo.

Otra de las cosas destacables que trae este juego es la capacidad de personalización de las partidas. En cualquier momento podemos acceder a un menú en el que modificaremos ciertos aspectos como por ejemplo elegir uno de los miis que tengamos en nuestra consola (por cierto, con mayor detalle en el cuerpo que los miis que estamos acostumbrados a ver), el baile que realice, la música de acompañamiento, su vestimenta, etc. No es que haya mucho donde elegir, pero a poco que nos busquemos la vida podemos tener una réplica de Michael Jackson haciendo giros sobre sí, o al mismísimo Mariano Rajoy bailando la Polka al son del Korobéiniki. También podemos modificar los fondos de juego, inclinación del tablero de juego, si queremos ver la sombra de la pieza o no, nivel inicial, modo sin fin, marcos, tipos de bloques, e incluso en algunos de los modos de juego descritos anteriormente tendremos otro tipo de opciones adicionales, como por ejemplo la de crear nuestras propias figuras en el modo Sombra.

Conclusiones

Esta versión de Tetris tiene mucho a su favor, sobre todo gracias a la inclusión de nuevos modos de juego nunca vistos anteriormente que sorprenden y sobre todo, enganchan, que es de lo que se trata. La parte negativa la pone un sistema de juego online mejorable y la existencia de múltiples versiones de Tetris en otras plataformas que, a pesar de quizá no sean tan vistosas, pueden enganchar tanto o más gracias a una jugabilidad más trabajada, aún a pesar de no ofrecer tanto contenido, como por ejemplo el todopoderoso TetrisDS.

La parte sonora incluye nuevas pistas que se adaptan perfectamente al estilo de juego, aunque tienen el "inconveniente" de que una vez hayamos elegido una, será la que suene hasta el fin de la partida, y lo mismo ocurre con los fondos. En resumen se trata de un buen juego que los adictos a los tetriminos agradecerán, además se encuentra a un precio relativamente acorde con lo que ofrece, pero el que simplemente busque echar una partida de vez en cuando, huyendo de nuevas fórmulas jugables que le puedan complicar la existencia, tienen otras opciones más baratas y menos complejas en la tienda virtual.