Análisis de Tank Troopers eShop (Nintendo 3DS)
A pesar de que Switch está a punto de aparecer en el mercado (ya sabéis que lo hará el próximo 3 de marzo), Nintendo va a seguir apoyando a Nintendo 3DS de manera muy consistente. Esta veterana consola va a seguir recibiendo títulos con frecuencia, algunos muy esperados, a los que se irán sumando otros más "modestos" que irán apareciendo a través de la tienda eShop.
Justamente aquí tenemos un gran ejemplo de esto último que acabamos de explicaros, Tank Troopers, un sencillo pero entretenido arcade de tanques que aterrizará dentro de unos días en dicho servicio digital de manera exclusiva.
Una guerra divertida
Al tratarse de un título de Nintendo y a pesar de que la guerra y los tanques sean sus componentes principales, ya podéis dar por sentado que no vamos a estar precisamente ante un juego de guerra en plan serio.
Más bien todo lo contrario.
En lugar de apostar por la simulación y el realismo, en Tank Troopers se ha enfocado toda la emoción de pilotar tanques desde una perspectiva desenfadada y del todo arcade. Una oferta de juego apta incluso para los jugadores más infantes y neófitos dentro del género, dado que todo se ha simplificado enormemente para hacer de esta obra un juego verdaderamente accesible.
Así de entrada controlar a los vehículos blindados que se dan cita en el juego es tremendamente sencillo. Basta con usar un par de botones para acelerar y frenar, el stick izquierdo para controlar la dirección y otro más para disparar. Y a esto se añade la posibilidad de usar el gatillo izquierdo para apuntar libremente a los rivales. En fin, que se trata de una apuesta por la simplicidad que le sienta bien al estilo de juego que propone esta producción.
¿Y de qué va todo esto? Pues básicamente estamos ante un shooter en el que tenemos que controlar a nuestro tanque y destrozar a los rivales a base de disparos. La acción tiene lugar en una colección de decorados para nada cuantiosa pero sí suficiente (una pradera, un puerto, un coliseo…), arenas que poseen unas dimensiones relativamente amplias.
Gozamos de entera movilidad y capacidad de desplazamiento por los entornos, los cuales por cierto están repletos de ciertos objetos o power ups que nos facilitan las cosas. De esta forma es posible recoger regeneradores de salud, mejoras de recargas de disparos y demás objetos durante las batallas, los cuales pueden suponer una ventaja muy importante.
Además también es posible ir adquiriendo nuevos tanques a cambio de una cantidad determinada del dinero que vamos recogiendo tras cada batalla, vehículos que ofrecen diferencias importantes en áreas tan clásicas como su resistencia o su velocidad y que, además, es posible personalizar con una mano de pintura. Existen más de 35, cifra realmente elevada.
Por otra parte, en cada tanque pueden tener cabida varios pilotos diferentes. Y cada uno de ellos posee su propia habilidad especial, desde aumentar la potencia de los proyectiles a paralizar a los rivales de manera temporal. Y conviene tenerlas en cuenta porque dichas aptitudes proporcionan ventajas considerables durante los combates.
En solitario y en compañía
El título presenta tres modos de juego principales, siendo dos de ellos multijugador. Precisamente esta vertiente es la que más peso e interés posee, modalidad que puede acoger hasta a media docena de jugadores simultáneamente.
Dicha modalidad multijugador local sólo está pensada para disfrutar de ella de manera offline, siendo éste precisamente el gran defecto que encontramos a esta producción porque pensamos que un modo online le hubiera venido fenomenal para su planteamiento.
A pesar de esta pega tan importante lo cierto es que el juego divierte bastante en dicha modalidad, que además se subdivide en varios modos de juego tanto individuales como por equipos, los cuales no nos han parecido ni demasiado variados ni tampoco numerosos… pero sí originales. En especial llama la atención el llamado Bombazos, que nos anima a aliarnos con nuestros compañeros para hacer explotar una bomba gigante en territorio rival.
Otra interesante opción es el modo Descarga, que con una sola copia del juego nos permite disfrutar de un modo multijugador también apto para seis personas pero en versión reducida (es decir, jugando todos con el mismo tanque y soldado).
¿Y qué pasa si queremos disfrutar del título en solitario? Pues que están esperándonos 30 misiones diferentes, las cuales pueden mantenernos entretenidos durante un par de horas o tres como mínimo.
La naturaleza de estas misiones es bastante simple y, de hecho, lo normal es que nos encarguen liquidar a todos los rivales que se dan cita en los escenarios, obtener un objeto determinado o llegar a un lugar concreto de los fondos. Tenemos un tiempo límite para conseguir nuestro propósito, lo cual añade algo más de mordiente al asunto.
Donde sí que no hay mucho punch es en todo lo relacionado con su funcional apartado técnico. Todo lo que se deja ver en pantalla es muy simple, desde los diseños 3D de los tanques y arenas de combate a las texturas que los recubren. Y esto es extensible al apartado sonoro, que incluye una banda sonora de corte belicista un tanto repetitiva y voces en español nada inspiradas.
Conclusiones
Sencillez y simpatía se unen en este arcade de tanques que apuesta especialmente por el juego multijugador. El problema es que esta modalidad ha quedado únicamente restringida a ser disfrutada de manera local, echándose mucho de menos la presencia de un modo online. El título divierte y se deja jugar, pero le falta una mayor profundidad para alcanzar cotas mayores… que tampoco persigue, dicho sea de paso.
Este análisis ha sido elaborado utilizando un código enviado por Nintendo.