Son muchos los estilos que se han utilizado en la música de videojuegos, podemos decir a estas alturas que se ha hecho de todo, una de las principales razones por las que no la consideramos un género. Y entre esos estilos musicales existen algunos que no solo se han utilizado en algún juego, sino que han sido una de las mayores influencias, especialmente si hablamos de las bandas sonoras hechas en Japón.
Nos referimos por supuesto al jazz fusión y el city pop, dos de los estilos que marcaron una generación en el país del Sol Naciente. Esta semana veremos algunos de los videojuegos, compositores y bandas sonoras que han tenido influencia de estas corrientes, así como las propias colaboraciones y discos de arreglos que se realizaron siguiendo justo ese estilo o con músicos que pertenecían a la misma escena.
Memories of a Summer Breeze
El jazz fusión y el city pop fueron dos de los estilos más populares durante los años ochenta en Japón. Su auge coincide con el de la burbuja económica, y la moda comenzaría a notarse a principios de la década a pesar de que muchos artistas abanderados como Tatsuro Yamashita, Haruomi Hosono, T-Square o Casiopea habían entrado a este espectro musical a finales de los setenta. Esto tuvo un impacto temprano en los videojuegos, ya que los propios compositores japoneses formaron sus influencias ahí. Los dos casos más conocidos seguramente sean Hiro Kawaguchi en OutRun y Koji Kondo en Super Mario Bros. Kondo era un fan de este estilo y se ve reflejado en las similitudes de sus piezas con «Sister Marian» de T-Square y temas de Yamashita, Piper o los Friendship de Dave Grusin y Lee Ritenour.
En 1989, Issei Noro —guitarrista de Casiopea— colaboró por primera vez en un álbum de SEGA. En concreto aparecía arreglando e interpretando «Rush a Difficulty» de Turbo Outrun en Super Sonic Team -G.S.M. SEGA 3-, confirmando que es la saga más asociada al jazz fusión y city pop. La buena relación de Issei Noro con la S.S.T. Band le llevó a aparecer en más discos durante los noventa, como Hyper Drive -G.S.M. SEGA 4-, Formula -G.S.M. SEGA 5- o Mega Selection II -G.S.M.SEGA-.
En 1990 el propio Koji Kondo vería su sueño realizado al recibir un álbum de arreglos de jazz fusión de Super Mario World. Aquel doble CD de Warner Pioneer, producido nada menos que por Koichi Sugiyama y Sadao Watanabe, contó con músicos de jazz como Soichi Noriki, Tsunehide Matsuki o el propio Watanabe en el saxo tenor. Nintendo repetiría la jugada en 1992 con F-ZERO, que obtuvo un álbum de Tokuma Japan a la altura con músicos de primera como Marc Russo (saxofón), Robben Ford (guitarra), Alphonso Johnson (bajo) o Alex Acuña (percusión), todos famosos músicos de jazz.
Los discos de videojuegos con versiones de fusión se convertirían en algo bastante común. Uno de los ejemplos más conocidos es el disco de Mega Man X con el guitarrista de jazz Toshiaki Ohtsubo y la banda Alph Lyla de Capcom, que literalmente se llamó Rockman X Alph-Lyla with Toshiaki Ohtsubo. Otro disco en clave de jazz fusión fue Policenauts F/N, en el que Motoaki Furukawa de Konami grabó las guitarras en colaboración con Koichi Namiki de SEGA para los arreglos de Policenauts. En 1990 Furukawa había lanzado también el disco de fusión Kukeiha Club —un álbum de la banda de Konami en solitario— con Masahiro Andoh, guitarrista de T-Square, y Akira Jinbo, batería de Casiopea.
Además de su primera incursión en aquel CD de Konami, Masahiro Andoh también entraría en los videojuegos en 1995, en este caso componiendo para juegos de Sony. El primero de ellos fue Arc the Lad, al que siguió la música de su secuela Arc the Lad II. Ahora bien, el juego por el que es más conocido es Gran Turismo, para el que utilizó versiones arregladas de su disco de jazz fusión en solitario Andy’s (1996). De ahí proviene el tema principal de la saga, «Moon Over the Castle», un tema que los propios T-Square han interpretado en vivo bajo el nombre de «Knight’s Song», como apareció en su disco Blue in Red.
Son muchas las bandas sonoras de videojuegos que han tenido influencia del jazz fusión y el city pop en su composición: Super Hang-On, Pilotwings, Robo Aleste, Elevator Action Returns, Snatcher, Street Fighter Alpha, Breath of Fire III, Ridge Racer Type 4... Además, en 1991 se incluyó el tema «Truth» de T-Square en el videojuego F-1 Grand Prix de VideoSystem, que fue sintonía de la Fórmula 1 en Fuji TV durante años y es la canción más conocida del grupo. En 2005 el sello Village Records publicó Grand Prix -Eternal TRUTH-, un disco de arreglos de Gran Turismo con músicos de jazz fusión y versiones del «Truth».
Ese mismo año, Issei Noro y el guitarrista Masayoshi Takanaka participaron en el evento Crossover Japan '05 Live, en el que dedicaron un divertido medley a la música de Dragon Quest III. También para Yakuza 6: The Song for Life se eligió como canción «Soubou» de Tatsuro Yamashita —extraída del disco Boku no Naka no Shounen de 1988—, una de las incursiones del rey del city pop en los videojuegos. Y aunque es complicado rastrear todas las influencias, el resurgir de esta corriente seguro que traerá muchas más en los próximos años. El contexto musical del Japón de los 80 no quedará en el olvido.
