¿Son las grandes sagas cinematográficas una especie de cárcel de lujo para los actores y actrices que participan en ellas? Según John Boyega, el actor británico de origen nigeriano, sí. El protagonista de la nueva trilogía de Star Wars como Finn, saltó a la fama gracias a la excelente Attack the Block, y luego pasó a ser un reclamo de grandes sagas como la citada franquicia galáctica o Pacific Rim. Crítico con su papel, alegando a un racismo inherente en Hollywood, el actor vuelve a la carga tras protagonizar varios titulares en los que afirmaba estar cambiando las cosas desde dentro de Lucasfilm. (vía ScreenRant).
John Boyega, las sagas cinematográficas de lujo y el racismo
Boyega, protagonista de Detroit, ha criticado el racismo de los estudios, que prefieren caras blancas y guapas antes que las de los actores y actrices negros o racializados. Directo y brusco en sus declaraciones, se ha convertido en un gran activista fuera de la pantalla, liderando movimientos como el de Black Lives Matter el pasado junio. Arriesgado según él mismo su propia carrera, Boyega ha hecho un esfuerzo consciente para continuar los debates sobre la representación racial en las grandes franquicias de Hollywood, comenzando con una mirada honesta al mal manejo de Star Wars con Finn en términos narrativos, un hecho que también perjudicó al Poe Dameron de Oscar Isaac y la Rose Tico de Kelly Marie Tran.
En su día, criticó a Disney por no hacer más para proteger a sus actores, y ahora, en plena promoción de Small Axe de Steve McQueen, confirma sus temores: las grandes sagas y blockbusters son una cárcel de lujo para los actores y actrices, atándolos de pies y manos e impidiéndoles hacer bien su trabajo. Siempre hay un creativo o un filtro o un comité detrás que decide qué hacer y de qué manera hacerlo.
Boyega ha confesado al medio CinemaBlend cómo se sintió en Star Wars. "Estar en una gran franquicia, a veces es como una cárcel de lujo para un actor cuando quiere hacer otra cosa", afirma. "Hay que recordar que cuando entras en una gran saga, acabas interpretando a un personaje durante muchos años, lo que puede matar de hambre a tus otros músculos", relata.
"Quería interpretar un tipo diferente de papel, un tipo diferente de hombre, y luego tuve la suerte de conocer a Steve McQueen al final. Todos somos parte de la misma industria, así que escuché y me informé sobre el estilo de dirección de Steve, sentí curiosidad y me emocionó tener la oportunidad de ser parte de él. Y cuando escuché que estaba preparando algo en la tele, no lo dudé, y pensé 'este es mi momento'", concluye. Boyega, que ha cerrado un trato con Netflix para producir sus propias series a través de su productora, encarnará a una estrella de F1 en un nuevo film con Robert De Niro.
