El coronavirus ha sacudido a la industria del cine en su totalidad. Si Hollywood ya comienza a dar por perdida la temporada de verano y empieza a pensar en 2021 como fecha para sus grandes estrenos y producciones. Mientras los grandes festivales se aplazan, cancelan o reconvierten al formato online, los organizadores de Cannes y Venecia confirman que no piensan volverse en celebraciones virtuales o en streaming porque iría en contra de los criterios que siempre han defendido.
Un festival con alma e historia como Cannes no puede ir a lo digital
"Es sencillo. Para un festival con el alma, la historia o la eficiencia de Cannes, ese tipo de modelo no funcionaría" comentaba el director de Cannes Thierry Fremaux, cuyo festival debería haberse celebrado del 12 al 23 de mayo, pero se aplazo por temor al COVID-19. En declaraciones concedidas a Variety, el presidente destaca que el corazón de Cannes es la sala de cine y el formato de encuentro entre aficionados y críticos en un mismo lugar, por lo que una versión virtual o en streaming no son posibles.
"De todas formas, habría que empezar preguntándoles qué opinan los poseedores de los derechos de distribución de estas grandes películas. Pero, ¿creéis que películas de Wes Anderson o de Paul Verhoeven pueden verse en un ordenador? ¿Os imagináis ver por primera vez Top Gun: Maverick o Soul en otro lugar que no sea un cine?", añadía Fremaux en relación a la liturgia de la sala de cine. "Estas películas han visto aplazado su lanzamiento en pantalla grande; ¿por qué deberíamos mostrarlas antes en un dispositivo digital?", comentaba.
De hecho, Paramount Pictures, Sony, Universal o Disney han tomado con determinación el cambio de fechas de sus grandes estrenos, retrasando meses o incluso un año completo la llegada de los blockbusters y films de este 2020. "El Festival de Cine de Venecia no puede ser reemplazado por un evento online", comentaba al mismo tiempo un portavoz del célebre festival de cine, que se celebrará en septiembre si todo va bien. Las razones, las mismas: las nuevas tecnologías son interesantes, pero no pueden sustituir a este tipo de eventos.
"A los directores de cine les impulsa y motiva la idea de proyectar sus películas en pantalla grande y de compartirlas en los festivales, no la de que sus obras acaben viéndose en un iPhone", comenta Fremaux en relación a la proyección en Cannes. "Si el festival se cancela, buscaremos otra manera de exhibir los filmes para evitar dar el año por perdido. Pero no creo que una alternativa precaria a improvisada a Cannes o Venecia sea la solución", concluía dejando la puerta abierta un modelo mixto.