Con el mundo en constante conflicto, no es de extrañar que la carrera armamentística sea una prioridad para muchos países. A modo de medida disuasoria, casi todos sacan músculo de vez en cuando, y ahora es China la que ha revelado que trabajan en un arma que hace palidecer a las de los videojuegos. Se trata de un railgun capaz de destrozar un tanque norteamericano con un único proyectil y sin necesidad siquiera de tocarlo.
Un railgun que parte en dos un Abrams M1 con solamente rozarlo
South China Morning Post comparte los datos de un estudio sobre un arma cinética de alta velocidad en el que trabajan ingenieros chinos. El cañón de bobina electromagnética, con capacidad para disparar proyectiles a velocidad hipersónica, el railgun o cañón de riel, es un proyecto abandonado por EEUU, pero parece que el gigante asiático lo tiene entre sus planes del futuro armamentístico.
Huang Jie, ingeniero al frente del proyecto, ha sido quien ha publicado los datos, repasados por otros profesionales independientes.
El resultado de las simulaciones resulta devastador para un tanque Abrams M1, el principal carro de combate del ejército norteamericano. Nada que pueda superar a la naturaleza, pero desde luego esto es más preciso con la misma capacidad de aterrar. Por razones obvias, no han compartido imágenes ni grandes detalles fuera de los necesarios para justificar su afirmación, en pos de evitar incidentes como los de War Thunder.
De acuerdo a sus datos, en el escenario de impacto directo, el tanque simple y llanamente se partiría en dos, ignorando por completo la armadura reactiva capaz de soportar incluso proyectiles antitanque. Lo tendría complicado contra algo más fuerte, pero debería ser capaz de aguantar la munición diseñada para destruirlo... pero como indican los chinos, no soportaría siquiera estar cerca de la trayectoria del proyectil de su cañón de riel.
Resulta interesante cómo afirman que sin necesidad de un impacto, simplemente pasando cerca el tanque también quedaría inutilizado, sin destruirlo físicamente por completo. El movimiento del proyectil sólido disparado por el cañón electromagnético (una bala de metal, sin carga explosiva y de 20kg de peso), que alcanzaría velocidades hipersónicas, crearía una onda de choque que inhabilitaría la consola estabilizadora de la torreta y acabaría con las conexiones del ordenador, dejando el vehículo completamente inoperativo.