La investigación para esclarecer los hechos que llevaron a la muerte de Halyna Hutchins en el rodaje de Rust luego del disparo de una pistola supuestamente de fogueo, siguen su curso. Tras las últimas pesquisas que llevaron a demostrar que esas armas de fuego se usaron para disparar latas durante los descansos de la producción, hoy sabemos que, gracias a dos análisis en paralelo, habrá consecuencias penales para los responsables del accidente mortal.
Dos investigaciones en paralelo y posibles penas de cárcel
Como explican desde Deadline, hay dos investigaciones en paralelo. Por un lado tenemos la que dirige el departamento del sheriff del condado de Santa Fe (Nuevo México, EE UU), lugar en el que se produjeron los hechos, y en el que se desarrollaba el rodaje del western.
En las próximas horas, la policía anunciará las novedades de su trabajo de investigación en el caso. Pero al mismo tiempo, se está desarrollando una investigación privada contratada por los productores de Rust y encargada a la firma de abogados Jenner & Block.
Esta investigación arrancó antes que la oficial y se puso en marcha tras el trágico accidente en el que Alec Baldwin, protagonista principal y también productor de Rust, disparase en el rodaje una supuesta pistola descargada con fatales consecuencias. "Además de brindar toda nuestra cooperación a las autoridades, hemos contratado a un equipo de Jenner & Block para investigar los hechos. Hemos subrayado que mantengan discreción absoluta en lo relativo a las personas con las que hablen y las conclusiones que reporten", han explicado los productores a los miembros del equipo. "Es posible que durante la próxima semana se pongan en contacto con algunos de vosotros", remarcaban fuentes de la producción del filme. Eso sí, aún quedan semanas para las conclusiones finales.
Un representante del departamento del sheriff ha afirmado que, pese a haberse registrado todo el set de rodaje, podrían solicitarse más órdenes de registro prologándose en el tiempo. Eso sí, no descartan nada. "En estos momentos todo está sobre la mesa; incluyendo cargos penales", explicaba el fiscal del distrito al New York Times (vía Cinemanía). Las últimas noticias sobre el accidente apuntan a dos personas: Hannah Gutierrez Reed, una supuesta armera profesional que no tenía la experiencia suficiente como para ponerse al cargo de las armas en ningún tipo de rodaje. Y Dave Halls, asistente de producción, que en un principio, no revisó que el arma que entregaba al actor para comprobar que estaba descargada. Halls ya había sido despedido de un rodaje por un error similar.
La filmación de Rust se ha detenido hasta que todo se esclarezca.