Val Kilmer perdió su voz. Tras haber sufrido un grave cáncer de garganta, el actor se vio completamente devastado: se le había despojado de una de sus armas para actuar. Además, sus amigos y familiares no comprendían lo que decía, complicando su día a día. Desesperado, estuvo trabajando para volver a modular su voz y su dicción y dio con una empresa, Sonantic, que le ofreció una solución: aplicar un software basado en la inteligencia artificial para reconstruir su voz original (vía The Washington Post).
La inteligencia artificial aplicada a la actuación
"Mi voz, tal como la conocía, me fue arrebatada. La gente a mi alrededor lucha por entenderme cuando hablo" explica una voz, reconocible como la del actor Val Kilmer, en un video compartido en YouTube por la propia Sonantic. Pero, ¿estamos escuchando al verdadero actor o una simulación? Kilmer, un auténtica estrella de los años noventa, perdió su voz natural después de una cirugía de cáncer de garganta en 2015, algo que destrozó su carrera y que alteró permanentemente la forma en la que se comunica con sus amigos y allegados. Pero a finales del año pasado, Sonantic, una empresa de software con sede en el Reino Unido, le propuso clonar su voz. Gracias a su software lograron un resultado que, como habéis podido comprobar en el vídeo que hemos incluido en la noticia, es más que realista.
Se trata de un sistema que está cada vez más implementado. Como explican en The Washington Post, son cada vez más las empresas emergentes que deciden comenzar a recurrir a los servicios de clonación de voz basados en la inteligencia artificial para producir desde asistentes como Siri o Alexa a videojuegos, pasando por recreaciones para actores y actrices. Las voces clonadas se han vuelto cada vez más realistas en la era de los deepfakes, como ya hemos podido comprobar en el caso de Bruce Willis. Cinco años después de la cirugía de Kilmer, sus representantes se comunicaron con Sonantic para restaurar digitalmente su voz perdida.
"Así que eso es lo que hicimos", explica Zeena Qureshi, directora ejecutiva y cofundadora de Sonantic. "El equipo de Val quería devolverle su voz para que pudiera seguir creando y actuando. El proyecto comenzó en diciembre de 2020 después de que Kilmer terminara de grabar Val, un documental sobre su carrera en Hollywood y su batalla contra el cáncer.
Sonantic no ha querido confirmar que otros actores y actrices han decidido contratar sus servicios, pero sí han destacado que en su cartera de clientes tienen a desarrolladores de videojuegos como Obsidian Entertainment y Remedy Games de Xbox Game Studios, ya que sus herramientas les permiten editar y dirigir cientos de miles de voces artificiales de manera similar a la que los directores pueden influir en las actuaciones de los actores y actrices de carne y hueso.
Los ingenieros de audio de la empresa suelen necesitar unas tres horas de audio para recrear una voz completamente nueva y creíble en apenas 24 horas. Pero debido a las restricciones de licencia de múltiples películas -ya sabéis, Hollywood, estudios y derechos de explotación comercial-, Sonantic tuvo que recrear la voz de Kilmer con menos de 30 minutos de audio. El proceso es parecido a una remasterización. Se recogen los sonidos antiguos, se limpian del ruido de fondo y se ensambla en base al texto base que usa la empresa para comprobar que los sonidos son creíbles. Una vez se tiene una voz clonada base, crearon un guion basado en el material recogido, vincularon el audio y el texto en fragmentos cortos y ejecutaron los datos a través de sus algoritmos de "motor de voz". "Estos algoritmos aprenden en base a lo que escuchan y les hacemos leer", concluyen desde Sonantic.
La firma dice que creó 40 versiones de la voz de Kilmer y seleccionó la opción de más alta calidad para capturar mejor la expresión del actor. Además, gracias a un sistema de emociones, que reacciona al significado de la frase y las demandas de los directores o programadores, la entonación puede cambiar en todo momento. Ponen por ejemplo un diálogo de prueba, que comienza como una conversación normal y que el software de Sonantic acaba desembocando en una pelea, llena de ira y expresividad, con gritos de todo tipo. "Kilmer puede hacer lo que quiera con esta voz clonada. Es exclusivamente su modelo. Podría usarla para uso personal o profesional si lo desea" concluía Qureshi. Como en el caso de Kilmer, la tecnología tiene posibilidades para las personas que tienen dificultades para hablar o para los actores que necesitan descansar sus cuerdas vocales después de largas sesiones de gritos en el estudio.