Los bailes de Fortnite se han vuelto una parte intrínseca a su experiencia: cada temporada se amplía el catálogo de expresiones musicales disponibles y los jugadores se afanan por conseguirlos para personalizar su avatar en el campo de batalla. Pero tan inseparables son estos bailes de Fortnite como las demandas por derechos de autor de los propios bailes. Y es que cada vez más personas demandan al juego de Epic Games por considerar que reproducen sus bailes sin su autorización y ganan dinero con ello.
Eso sí, la victoria legal suele acompañar a Fortnite. El juego suele salir vencedor de la mayoría de pleitos que le acusan de infringir derechos de autor: el último caso, una demanda planetada por los jugadores de baloncesto Jaylen Brantley y Jared Nickens, también ha acabado desestimado por no poder demostrar que hubiera una infracción del copyright.
Lo curioso es que aquí hay pruebas suficientes de que Jaylen Brantley y Jared Nickens llevan ya varios años haciendo este baile a modo de reto de Internet que se llama ‘Running Man Challenge’, algo que inspiró a los creadores de Fortnite a llamar a su baile ‘Running Man’. Pese a esa prueba, la demanda no ha ido a más y los creadores del baile no verán recompensada la violación de derechos de autor.
Posibles cambios en la legislación
Bien es sabido que Fortnite aprovecha la cultura popular y los memes para sus bailes, es por eso que en ocasiones se encuentra con autores de estos bailes que al ver que están ganando dinero con sus creaciones (los bailes se venden en la tienda digital del juego) reclaman los derechos de autor. El pasado mes de marzo se supo que actualmente hay cinco grandes demandas de este tipo paralizadas -la de Alfonso Ribeiro (El príncipe de Bel-Air), Russell "Backpack Kid" Horning, "Orange Shirt Kid" y los raperos Terrence "2 Milly" Ferguson y James "BlocBoyJB" Baker- mientras se regula la legislación estadounidense para dar una respuesta consensuada a todas.
