J. Allen Brack, presidente de Blizzard, ha pedido perdón a la comunidad por el posicionamiento de la empresa ante las protestas de Hong Kong por la represión de las autoridades. Y es que la empresa ha estado en el ojo del huracán cuando impuso un severo castigo a un jugador profesional que se pronunció a favor de los manifestantes, que defienden la independencia de Hong Kong frente a China en una crisis social que azota la región con especial intensidad desde hace ya varias semanas.
La situación hizo que se convocara una protesta para la BlizzCon, que en efecto tuvo lugar ayer, y de la que ya os hablamos siguiendo las reacciones de los manifestantes. Lo cierto es que en Blizzard incluso han perdido patrocinadores.
Presión social y política sobre Activision Blizzard
La cuestión es que, pese a los fuertes intereses económicos en China, que ha presionado también a la NBA y demás organizaciones y empresas de EE.UU. para que no se posicionaran a favor de los manifestantes de Hong Kong, son muchos los colectivos de usuarios que han optado por boicotear las empresas que se han doblegado a las presiones del gobierno de Xi Jinping.
Dicho de otra manera, las quejas por la censura y el apoyo a la represión en Hong Kong por parte de importantes multinacionales no se ha limitado al mundo del videojuego. Incluso políticos de repúblicanos y demócratas de EE.UU. han presionado a Activision Blizzard.
Brack cambia de rumbo
J. Allen Brack ha dicho ante los asistentes a la BlizzCon que "Blizzard tiene la oportunidad de unir al mundo, y no lo hemos hecho. Tomamos una decisión demasiado rápida, y luego lo empeoramos todo al ser muy lentos a la hora de hablar con vosotros".
"Cuando pienso en lo que más me entristece de todo esto, pienso en dos cosas. Lo primero es que no alcancamos los estándares tan elevados que nos imponemos a nosotros mismos. Lo segundo es que fracasmos en nuestro objetivo. Y por eso pido disculpas y acepto mi responsabilidad".
Blizzard quiere mirar hacia el futuro
El ejecutivo no ha profundizado en esa cuestión, y ha optado por mirar hacia el futuro. Dicho de otra manera, no ha indicado de forma clara si van a corregir todas sus acciones y si van a volver a ceder a las presiones del régimen chino.
Brack ha terminado la intervención al respecto recordando que la BlizzCon es un evento internacional al que han asistido este año visitantes de 59 países diferentes. "Aspiramos a unir a todo el mundo con gran entretenimiento. Y creemos realmente en el poder positivo de los videojuegos".
"Cuando acertamos, creamos un territorio común para que la comunidad pueda unirse", como sucede con la BlizzCon, no solo con sus videojuegos.