El diseño de un mundo de videojuego es una de las posibilidades más atractivas hoy día para un artista. De su imaginación surgirá todo un universo lleno de aventuras del que pueden disfrutar millones de personas y poblado por los personajes que haya creado. El diseño visual de un juego es su primera seña de identidad y la más llamativa en la mayoría de los títulos.
Las posibilidades de trabajar como artista en el desarrollo de un videojuego son muy variadas, explica Martín M. Barbudo, profesor de diseño vectorial y concept Art: Personajes, Escenarios y Props del Grado Universitario en Diseño y Desarrollo de Videojuegosde la Escuela Universitaria de Diseño, Innovación y Tecnología ( ESNE), donde han estudiado desarrolladores que ahora están en estudios como Team Gotham o Gameranest. En primer lugar está el concept art son las ilustraciones que expresan la atmósfera global del juego, su estilo visual… muestran el ADN, la conceptualización del título en unas cuantas imágenes.
La visión del artista es lo que hace que destaque el producto
Después está el diseño de los personajes y los escenarios y su posterior modelado, lo que incluye las texturas, el shading (sombreado) de materiales, la animación -ya sea en 2D o en 3D-, las partículas y los efectos de iluminación, las escenas de vídeo e incluso el arte para publicidad y marketing "ya sea basado en material del propio juego o creando nuevo contenido", dice Barbudo. El artista define también la interfaz del juego, tanto el HUD que aparece en la pantalla principal como los distintos menús.
En los primeros años de los videojuegos el diseño artístico tenía grandes limitaciones técnicas por la cantidad de píxeles que podían usarse, el tamaño y la resolución. Pero hoy día "no hay prácticamente límites visibles frente al hiperrealismos del cine -afirma Barbudo-. Ahora mismo hemos llegado a tal punto que es la visión del artista lo que hace que destaque el producto de manera más llamativa, que antes no se haya explorado o visto".
Las teorías artísticas tradicionales siguen vigenes, y se incorporan a la tecnología
Esto no quiere decir que hayan quedado obsoletas las teorías artísticas tradicionales, aclara Barbudo, que siguen presentes en la elección de colores en el diseño de los personajes, en la silueta y las proporciones, la composición de los elementos dentro del escenario o el tiro más adecuado de cámara.
El diseño por ordenador ha llegado para ofrecer todo un universo nuevo en el que demostrar las cualidades artísticas, y eso implica conocer las herramientas informáticas necesarias para el desarrollo de un videojuego. Mohammed Bakir, profesor de Tratamiento Digital de Imágenes en el Grado en Diseño y Desarrollo de Videojuegos de ESNE, afirma que esto supone manejar la suite de Adobe, programas de animación y edición 3D como Maya, Max y Blender y otros especializados en animación 2D (como Spyne o Harmony).
Es importante conocer los motores de juego
Además, conviene tener conocimientos sobre cómo funciona el motor de juego. "Según el motor, el tratamiento de la luz, el postproceso y los shaders influyen enormemente en el resultado", explica Bakir, así que sabiendo cómo funciona el artista sabrá si puede conseguir el efecto que desea y "puedes ahorrarte enormes cantidades de tiempo y esfuerzo (que se traduce, al final, en dinero) a la hora de desarrollar animaciones y efectos especiales", añade.
Por ello, Bakir destaca la formación multidisciplinar que se imparte en ESNE en la que "los artistas reciben formación en aspectos técnicos propios de la programación y los motores de juego, así como aspectos creativos propios del diseño de juego y de niveles. Esto amplía la imagen que forma el artista en su proceso creativo. Asimismo, facilita el desarrollo de otro perfil también muy importante, el del artista técnico", dice Bakir.
El aprendizaje de los programas de diseño y animación es necesario lo mismo para el desarrollo de una superproducción en la que el artista se especializa en una función determinada como para un juego independiente realizado por un pequeño estudio.
