El analista de Wedbush Securities, Michael Pachter, que ha protagonizado más de una predicción acertada, ha querido comentar el último movimiento de Microsoft: incluir en el sistema de suscripción Xbox Game Pass aquellos títulos first-party en su fecha lanzamiento.
"No creo que signifique nada para las ventas de consolas. Es una forma inteligente de brindar a los consumidores acceso a una gran cantidad de contenido a un precio razonable, y nada más", comentaba Pachter. "Por el precio de dos juegos nuevos por año (120 dólares), un suscriptor de Game Pass puede reproducir el contenido de first-party de Microsoft, además de 100 juegos más".
En este sentido, Pachter indicaba que "es un buen negocio" siempre que el usuario tenga intención de comprar al menos un título first-party de Microsoft. "Con tantos fans de Halo, Forza y Gears of Wars deberían experimentar un aumento en las suscripciones", concluía.
Sin embargo, en cuanto a la posible repercusión que pueda tener esta decisión en las ventas de consolas, el analista comentó lo siguiente: "No veo ninguna correlación con las ventas de consolas pero, tal vez, este programa los beneficie a largo plazo".
¿Y las pérdidas?
Teniendo en cuenta que un título de salida de Xbox One cuesta alrededor de 60 o 70 euros, y Game Pass tiene un precio de 9,99 euros al mes, la pregunta que resta hacerse es si Microsoft sufrirá pérdidas y cuál será el impacto en los costes de desarrollo.
A la pregunta de si Microsoft sufrirá pérdidas, Pachter se mostró tajante: "No lo creo". Agregó lo siguiente: "Teóricamente, alguien podría suscribirse un mes y luego cancelarlo, pero la mayoría de las personas que se inscriben permanecen como miembros al menos un año".
En noticias relacionadas, los juegos Game Pass que pertenezcan a la categoría PlayAnywhere podrán disfrutarse tanto en Xbox como en Windows 10.
