Blake Jorgensen, responsable financiero de EA, ha ofrecido a USB Global Technology Conference una serie de declaraciones en la que confirma la mejor salud comercial de sus títulos y proyectos una vez la empresa ha decidido pasar a la monetización de sus títulos con micropagos o potenciar servicios como EA Access. Las declaraciones coinciden con la polémica de este tipo de compras y aspectos en el reciente Star Wars Battlefront II.
Lo monetización de los juegos es clave en el futuro de la empresa
"Si se tiene un servicio online como EA Access y Origins Access, puedes tener una suscripción sin límites", explica Jorgensen. "Ofrecerle a la gente una manera de gastar dinero en cosas que quieren hacer en los juegos y ver cómo disfrutan o darles la única oportunidad de un pago al mes de 9 o 10 dólares, ahí radica todo", explica Jorgensen.
"Sabemos que existen usuarios que únicamente disfruta de un par de juegos en concreto, y gastan el doble en ellos, muchas veces simplemente reduciendo el coste de acceso a los mismos", comenta.
"Battlefield 4 suele ser el cuarto, quinto o sexto videojuego más jugado del mundo día tras día. Está casi siempre en el top 10 de los juegos más disfrutados, y hablamos de un titulo que ya tiene cuatro años de antigüedad", expone. "Si ofrecemos un servicio constante, continuo, y mantenemos a los jugadores enganchados, dándoles mucho contenido, podemos también encontrar la forma de monetizarlos a lo largo del tiempo", argumenta.
"Es una oportunidad de negocio enorme, y nos presenta la forma correcta de construir una estructura de juegos como servicio para nuestro negocio", añade. "Más o menos nuestro negocio depende de nuevos juegos y los lanzamientos. Pero hemos sabido traer nuevas licencias y convertirlas en sagas, como Star Wars y Battlefront. Queremos hacer lo mismo con Anthem, el nuevo juego de BioWare", comenta en relación a la producción y los desarrollos en EA, de los cuales os hablámamos esta mañana. Las declaraciones de EA van en consonancia a las de Take-Two, que también hablaba de la monetización constante de los jugadores como principal fuente de ingresos.