Valve ha actualizado los términos de uso de sus videojuegos para proteger a los jugadores de la reciente polémica que está asolando a Youtube desde que Google comenzó a eliminar las capturas de videojuegos subidas por los usuarios para evitar posibles problemas de copyright.
"Sois libres de rentabilizar vuestros vídeos a través de YouTube y otros sitios para compartir vídeos", se puede leer en un comunicado de Valve. "El uso de nuestros contenido en vídeo debe ser no comercial. Eso significa que no podréis cobrar a los usuarios por ver o acceder a vuestros vídeos. Tampoco podréis vender o licenciar vuestros vídeos a otros a cambio de un pago de cualquier tipo".
La compañía también ha querido aclarar que aunque subir vídeos de jugabilidad está permitido, los usuarios no deberían distribuir partes concretas de los juegos por separado, como el doblaje o la música. Valve no ha sido la única compañía de videojuegos en responder a esta polémica, ya que Capcom y Blizzard también han hecho movimientos similares para que los jugadores puedan seguir subiendo vídeos de sus juegos.
