BioShock Infinite se sitúa a principios del siglo 20, pero Irrational Games tenía otro concepto en mente al principio de su proceso de desarrollo.
Según revela Bill Gardner en una entrevista con Polygon, el juego podría haber estado ambientado en el Renacimiento, "pero a los seis meses se anunció Assassin's Creed II y me quedé 'bueno, vale, se nos han adelantado'".
Gardner revela que se ha descartado contenido de BioShock Infinite para hacer cinco o seis juegos completos. Confiesa que "duele cuando hablas de cortar a uno de tus hijos, pero el resultado final vale la pena".
BioShock Infinite llegará el 26 de marzo a ordenadores, Xbox 360 y PlayStation 3, y esta misma tarde tendremos un vídeo especial, doblado al castellano.