El servicio PlayStation Network es completamente gratuito, y así lo seguirá siendo, según la propia Sony. Sin embargo, durante el E3 2010, se presentó PlayStation Plus, un nuevo servicio de pago opcional con contenido que, dependiendo de cada usuario, puede ser rentable o no.
Existen dos tipos de suscripción, de 90 días (14,99 euros) y por un año (49,99 euros). Una vez adquirida una de estas modalidades, el usuario dispone de ventas en un apartado especial de PlayStation Store que varían cada mes, y que consisten habitualmente en juegos completos de PlayStation Network, juegos de categoría Minis –compatibles también con PSP-, clásicos de PSOne –también para PSP- y diversas ofertas de descuento tanto para adquirir juegos o complementos de descarga. Hay avatares y temas dinámicos gratuitos, y ocasionalmente demos con una exclusiva temporal respecto al resto de jugadores y accesos tempranos a betas. Sony valora el contenido anual en aproximadamente 200 euros, por lo que los compradores de mucho contenido digital pueden ver la oferta muy tentadora.
PlayStation Plus debe considerarse como un alquiler, más que una adquisición en tarifa plana. Su característica es que, una vez cancelada la suscripción, se pierde el contenido adquirido por este servicio –excepto avatares y temas dinámicos-. Eso significa que la mayor rentabilidad se consigue con el plazo más largo, o renovando periódicamente PlayStation Plus para acumular más contenido. Es importante también citar que las ofertas varían cada mes, y que es posible que nuestro interés sea diferente según el periodo del año cambie drásticamente. Por ejemplo, es fácil esperar betas de los títulos más esperados dos o tres meses antes de su lanzamiento, y por lo tanto, las fechas de otoño son idóneas para conseguir esos accesos tempranos. De todas formas, se intenta equilibrar cada mes con juegos más o menos importantes, pero resulta necesario ver el contenido programado para el mes de la suscripción para aprovechar sus ventajas desde el primer momento.
