El mercado de los videojuegos para teléfonos móviles o smartphones está sobresaturado, hemos pasado de juegos que costaban 0,79 € a ser casi todos gratuitos con micropagos –y no tan "micros-, y la canibalización es tal que solo un reducido porcentaje son rentables, y de estos muy pocos se consiguen quedar en la memoria de los jugadores y hacerse populares. Entre los afortunados, aquellos que salieron en el momento justo, en la época dorada del iPhone, donde todo nos parecía nuevo y fresco, y no nos importaba pagar un módico precio por juegos como Angry Birds, Cut the Rope o Plants vs. Zombies.
Se ha hecho de rogar, pero este verano por fin se va a lanzar Plants vs. Zombies 2: It’s About Time, una secuela muy esperada para aquellos que le han echado infinidad de horas al original, un tower defense que puso el género de moda, o al menos lo acercó al gran público.
Además de la esperada continuación, en este E3 PopCap Games y Electronic Arts nos sorprendieron con un anuncio, el salto de la saga a los juegos de acción, aunque sin abandonar su propuesta de tower defense, con Plants vs. Zombies: Garden Warfare, un título que ya de por sí destila humor e ironía, como el resto del producto.
De momento en exclusiva para Xbox 360, Xbox One y PC, la llegada de los zombis y las plantas a la acción en tercera persona llega apadrinada por el Frostbite 3, el avanzado motor gráfico de DICE, que utiliza el espectacular Battlefield 4, y multitud de títulos de EA en los próximos meses, como los nuevos Need for Speed y Dragon Age. Empezamos comentando esto porque lo primero que llama la atención al ver en directo Plants vs. Zombies: Garden Warfare es su llamativo y cuidado apartado gráfico, mucho mejor de lo que se podría esperar de un título simpático y sin pretensiones. Es más, aunque parezca exagerado, fue uno de los juegos más vistosos y bonitos que vimos en todo el E3, sorprendente cuanto menos.
Gracias a su apartado técnico, y el elaborado diseño artístico, es como si estuviéramos viendo una película de animación hecha videojuego, no nos hubiéramos imaginado una mejor adaptación de los sprites del original Plants vs. Zombies a un entorno tridimensional. Y hemos empezado hablando de cómo entra por los ojos, ya que no lo pudimos probar, aunque sí presenciamos una demo en directo, que nos dejó bastante claro en qué consistirá el juego.
Lo primero que demostraba al empezar la demo es el humor que destila, ya que no solo en el título se cachondea de Call of Duty y la serie Modern Warfare, sino que también antes de comenzar la acción, el briefing que te dice el nombre de la misión y el lugar donde se desarrolla, homenajea claramente y de manera muy graciosa al juego de Activision. Como en el juego de móviles, encarnando a las plantas nuestra misión es detener el avance de los zombis y que no lleguen a la base. Para ello contamos con diferentes tipos de plantas con sus respectivas habilidades, con la diferencia de que ahora se pueden mover libremente por el escenario, ya no están estáticas, o bueno, al menos no todas.
La Planta Carroñívora se puede comer a los zombis si antes los ha impregnado de un líquido morado, o bien meterse debajo de la tierra y emerger a la superficie para comérselos de un bocado, además de ser capaz de poner unas trampas en forma de enredaderas, que atrapan a los enemigos. El Girasol lanza unos potentes rayos de luz que dejan fritos a los zombis, y también puede curar a sus compañeros, algo que será imprescindible.
El Lanzaguisantes es la unidad estándar, la más equilibrada, y puede colocar una especie de tomates explosivos, además de colocarse un casco de batalla y ponerse a disparar con una mortífera torreta. Y por último el Cactus, el francotirador del grupo, que dispara sus pinchos a toda velocidad, coloca minas, además de desplegar un dron de combate, una cebolla voladora que controlamos directamente y con la que podemos disparar desde el aire.
Contamos con cinco vidas para cada clase personaje, dos habilidades más un ataque especial, que se recargan con el tiempo, y además la posibilidad de en las macetas vacías colocar otras plantas, como en el título original. Por supuesto todas las clases de zombis que vimos en el juego para móviles también los veremos aquí, desde los normales, que simplemente se abalanzan sobre nosotros, a otros que nos disparan, gigantones, y jefes finales, como Disco Zombi. Este zombi que sustituyó en su día al de Michael Jackson por problemas legales, fue el más gracioso que vimos en la demo, y vino acompañado de un elenco de bailarines a ritmo de música, dejando claro, por si había dudas, del tono humorístico y desenfadado del juego.
Tendremos un modo cooperativo online para 4 jugadores, en el que combatir junto a unos amigos a interminables hordas de zombis, y un modo de batalla para 24 jugadores, en el que podremos elegir el bando, si ser zombis o plantas. Todo esto en 10 mapas distintos, tanto cooperativos como competitivos. Puede ser muy divertido ponernos en la piel de los zombis, y tenemos ganas de ver en acción el multijugador competitivo y sus posibilidades.
Aunque nos han mostrado muy poco, ha sido lo suficiente para ver que tiene pinta de ser muy divertido, original y distinto dentro del género de la acción, que se suele tomar demasiado en serio, aquí con una propuesta más gamberra y desenfadada. Llegará en 2014 a Xbox 360, Xbox One y PC, y desconocemos los motivos por los que en consola solo se ha anunciado para el hardware de Microsoft. Se desconoce si es una exclusividad absoluta o temporal, y por tanto, si llegará en un futuro a otras consolas.