Obsidian Entertainment es un grupo con gran experiencia en el diseño del videojuego pero, de algún modo, siempre han estado a la sombra de Bioware, para la que han hecho las secuelas de algunos de sus juegos, desde aquel Icewind Dale que los dio a conocer hasta el más reciente Caballeros de la Antigua República 2. A este todavía pequeño estudio norteamericano le llega ahora la mayoría de edad, y Sega es la encargada de darle la alternativa con su primer juego original, Alpha Protocol, que cuando nos los mostraron en la reciente Games Convention nos pareció tan ambicioso como prometedor.
Innovando en un campo establecido
Alpha Protocol es un juego de rol, acción y espionaje. Esta extraña combinación de géneros no se ha visto nunca, y tiene un gran reto por delante; el género de los juegos de espionaje es pequeño pero está muy establecido, y sus dos mayores exponentes, Splinter Cell y sobre todo Metal Gear Solid, son juegos de espionaje bastante exigentes, pero también lineales, circunstancia obligada por el fuerte componente de historia que tienen, especialmente el segundo.
La idea de Alpha Protocol es hacer que el jugador tenga decisión en esta historia, y que aparte de pegar tiros y escondernos de los enemigos, tomemos decisiones que afecten al desarrollo del juego. Y, por supuesto, todo eso de disparar, ocultarse, el daño del arma y la percepción de los enemigos, seguirá los parámetros de los juegos de rol, aunque sin dejar de ser acción en tiempo real, muy en la línea del exitoso Mass Effect.
En desarrollo desde principios de 2006, y con lanzamiento previsto para febrero de 2009, los creadores de Alpha Protocol se propusieron tres objetivos cuando comenzaron el desarrollo: hacer un juego adulto, hacer algo nuevo, y hacer un sistema de rol diferente. A falta de conocer el último, que obviamente no se desveló en toda su expresión, los dos primeros objetivos parecen cumplidos. En Alpha Protocol nos encontramos con una historia de conspiración internacional que abarca todo el mundo, y en nuestra aventura visitaremos numerosos lugares dispersos por todo el globo, generalmente contando con varios lugares que visitar en cada momento, en el orden que nosotros queramos, reforzando la idea de no linealidad del juego.
Antes de comenzar una misión, nos mostraron el piso franco de nuestro espía, en Oriente Medio, y cómo en él podemos elegir entre varios trajes, desde vestimentas de paisano bastante estándar, hasta complejos trajes de espionaje y de combate. Todas estas diferentes vestimentas modificarán de algún modo el comportamiento de nuestro espía, desde la agilidad con la que se moverá hasta la capacidad de camuflarse con el entorno, así como la cantidad de ítems que puede llevar y la defensa ante los golpes o los impactos de bala que le proporcionará. Para diseñar el héroe y sus posibilidades, los desarrolladores se han inspirado en lo que ellos llaman "las tres grandes jotas": Jason Bourne, Jack Bauer y, por supuesto, James Bond. Aparte de configurar nuestra vestimenta o armadura, tenemos un armario lleno de armas en el que podremos elegir qué tipos de armas podemos llevar y configurarlas exhaustivamente, eligiendo el tipo de munición, aplicándoles cañones, silenciadores o mirillas, y en general configurando todo aquello que se puede esperar tocar en un juego de rol, pero aplicado a las armas de fuego, lo que es relativamente novedoso.
Tras prepararnos para la faena, llegó el momento de la misión, en la que teníamos que infiltrarnos en la base de un traficante de armas para que nos lleve a donde nosotros queremos, es decir, más arriba en la organización. Lo primero que nos llamó la atención son las diferentes formas que tenemos de llevar a cabo la misión. Podemos optar por la infiltración pura o por el asalto directo, o bien el término medio que nos mostraron en la demo: hablar con el guardia, lograr contarle una mentira (con un sistema similar al de Mass Effect, Caballeros de la Antigua República u Oblivion, con porcentajes de acierto), y entrar en la base, para segundos después oír la alarma al haberse descubierto nuestra treta.
Conversaciones y sutilezas
Esta capacidad, la de dialogar con el enemigo e intentar engañarle, es absolutamente natural en un juego de rol pero tratándose de un juego de acción y espionaje, es tremendamente novedoso y al mismo tiempo tiene mucho sentido. ¿Cuántas veces Bond, Bourne o cualquier héroe ha usado una treta para evitar un enfrentamiento? ¿Cuántas veces ha fracasado y han tenido que resolver la situación a tortas? Nuestra capacidad para embaucar dependerá, como es de esperar, de los atributos de nuestro héroe. Precisamente los desarrolladores hicieron hincapié en ésta como una de las características claves del juego, los diálogos sutiles, con toque dramático, que estarán integrados en la jugabilidad e influirán en ella.
Luego llegaba la hora de escondernos de los enemigos y atacarles, comportándose el juego como un título de acción y espionaje al uso, con mucha interacción con el escenario y lo que parecía ser un sistema de control bastante cómodo en la línea de un juego de acción en primera persona. Tras ocultarnos durante unos momentos, éramos descubiertos y se iniciaba un tiroteo, pudiendo usar el escenario, como objetos explosivos, a nuestro favor, y contando con disparos críticos, y la posibilidad de que los tiros sean más certeros, cerrándose el punto de mira, cuanto más tiempo apuntemos al enemigo. Existen las eliminaciones sigilosas, con silenciador, pero en el momento en el que estábamos eran imposibles al llevar nuestro personaje dos ametralladoras al mismo tiempo, haciendo uso de una habilidad especial. Habrá, naturalmente, un árbol de habilidades por el que ir haciendo "crecer" a nuestro personaje por un camino de evolución.
Finalmente, llegábamos al traficante de armas y teníamos opción de hacer qué hacer con él, decidiéndolo tras un diálogo con el control de la misión, pero teniendo varias opciones a nuestra disposición sin estar ninguna cerrada a primera vista. Cada acción, nos advirtieron, tendrá consecuencias en la historia. En febrero de 2009 llegará uno de los juegos de acción y espionaje más prometedores de los últimos tiempos, y lo que vimos en la Games Convention nos hace esperarlo con muchas ganas.