Final Fantasy VII Remake fue durante años uno de los juegos más esperados hasta su lanzamiento, momento en el que fue alabado tanto por la crítica especializada como por los jugadores. Sin embargo, su exclusividad temporal en PlayStation 4 impidió que un amplio sector del público pudiera disfrutar de uno de los mejores juegos de 2020. En junio de este año se lanzó Final Fantasy VII Remake Intergrade para PlayStation 5, el mismo título con varias mejoras visuales que venía acompañado de un DLC exclusivo para la consola de última generación de Sony. Es esa edición la que este 16 de diciembre llega a un público mucho mayor, el de los jugadores de PC, a través de la Epic Games Store.
Una revolución del concepto de remake y una evolución del JRPG
No vamos a entrar en todos los aspectos que hacen de Final Fantasy VII Remake un juego imprescindible para los fans del juego original, para los aficionados a los RPG, para quienes gusten de una buena historia, y básicamente, para todo aquel que disfrute de los videojuegos: para eso ya está nuestro completo análisis de la versión de PS4.
Al fin y al cabo, la obra de Square Enix es uno de esos pocos títulos que se pueden tildar de importantes. El motivo más obvio es porque reconstruye la primera parte (la zona de Midgar, llegarán continuaciones de este FF7 Remake en el futuro) de Final Fantasy VII, uno de los hitos culturales del videojuego, permitiendo a los fans de aquel experimentar el influyente título con las mejoras visuales y de diseño de juego que el medio ha sufrido a lo largo de los últimos 24 años, a la vez que permite disfrutarlo a nuevos jugadores.
Además, es un título que lleva más allá el concepto de remake. Aunque los hechos principales se mantienen intactos, se desarrollan mucho más los personajes secundarios y sus motivaciones, se representa mucho mejor la vida en Midgar, y lo más importante: es un juego autoconsciente de que otro Final Fantasy VII se lanzó hace más de dos décadas. El concepto de remake también se revoluciona por cómo varía las mecánicas de juego, sobre todo en su sistema de combate, apostando por una acción espectacular que es tan o más estratégica que el combate por turnos tradicional.
INTERmission, el DLC de aproximadamente cinco horas hasta ahora exclusivo de PlayStation 5, se incluye en la versión para ordenador. Se trata de una historia paralela a la del juego principal (por lo que es recomendable jugar a ese antes, aunque no es obligatorio) protagonizada por Yuffie y su compañero wutainés Sonon. Si bien la trama principal que se cuenta aquí no está precisamente inspirada, se disfruta mucho porque la protagonista desborda personalidad, porque el sistema de combate es aún más dinámico que en el juego base, y porque ofrece un final ampliado que pone los dientes largos para una segunda parte del remake que sigue sin tener fecha de lanzamiento
Un port correcto a PC falto de opciones
La versión que Square Enix ha llevado a ordenador es la de PlayStation 5, que respecto a la de PS4 aumenta la fluidez (tenía un modo rendimiento a 60 fps y otro calidad con resolución 4K a 30 fps), prácticamente elimina los tiempos de carga, y mejora en iluminación, en sombras y en ciertas texturas. La versión para PC conserva todos esos elementos, y aunque sus requisitos mínimos y recomendados no son elevados, se trata de un port muy poco escalable debido a la falta de opciones.
Hay tres ajustes gráficos: resolución de la texturas, definición de las sombras y cantidad de personajes en pantalla. Las dos primeras opciones solo permiten elegir entre "Baja" y "Alta". La tercera se trata de un slider que va de 0 a 10 que representa la densidad de peatones que encontramos en los pueblos y en las ciudades. Por supuesto, se puede cambiar la resolución, que permite hasta 4K, pero no tiene compatibilidad con pantallas ultrapanorámicas. Tampoco se permite el framerate desbloqueado ni desactivar la sincronización vertical. Hay cuatro opciones de fluidez: 30, 60, 90 y 120 fps. A todo ello hay que sumar la compatibilidad con HDR. La asignación de controles para teclado y ratón se puede personalizar al gusto, y permite usar mandos compatibles con XInput y DirectInput, además de los pads de Xbox, el DualSense y el DualShock 4.
En el rendimiento hay una de cal y otra de arena. Con todos los ajustes al máximo y a resolución 1440p nos ha funcionado de lujo, oscilando entre los 90 y los 120 fps, pero manteniéndose la mayoría del tiempo en los 120 fps, con el siguiente equipo: Nvidia RTX 3070 8 GB, AMD Ryzen 5600X 3,7 GHz y 32 GB de RAM. Sin embargo, parece haber un problema en cómo el juego va cargando los elementos en pantalla, pues hay tirones eventuales que apenas duran medio segundo, especialmente al desplazarse por las zonas más abiertas. Por mucho que hemos cambiado opciones no hemos conseguido eliminarlos, pero sí que se aprecian menos al reducir la fluidez a 90 o 60 fps.
A excepción de ese detalle, se trata de un port correcto que, salvo por la fluidez hasta 120 fps, no mejora en nada la versión de PS5. Pero a la vez parece poco trabajado. La falta de opciones gráficas impide ajustar la experiencia de manera óptima a aquellos que tengan un equipo potente de hace unos años: parece que hay que elegir entre gráficos de PS4 o de PS5. La ausencia de compatibilidad con monitores ultrapanorámicos es extraña en una superproducción actual para ordenador. Y por pedir, no habría estado de más la utilización de tecnologías como Nvidia DLSS y/o AMD FSR para poder jugar a altas resoluciones sin que haya un alto impacto en el rendimiento.
A la izquierda, los ajustes de texturas y sombras en bajo con la densidad de población rebajada. A la derecha, todos los ajustes al máximo (podéis ampliar la imagen pinchando sobre ella).
Conclusiones
El lanzamiento de Final Fantasy VII Remake Intergrade en PC es motivo de alegría porque permitirá a muchísimos jugadores que no tienen PS4 o PS5 (y a fans de los videojuegos de mercados donde no son habituales las consolas) disfrutar de uno de los mejores RPG de la generación que ya se marchita; además, los usuarios de PS4 que no hayan podido jugar a INTERmission porque no pueden conseguir una PS5 tienen aquí una opción para hacerlo, aunque hay que tener en cuenta que el juego se estrena a 80 euros. El port es ni más ni menos que correcto, aunque nos habría gustado tener más opciones para escalar la experiencia a lo que permitan las distintas configuraciones de hardware y que se aprovecharan las tecnologías más modernas y cada vez más habituales del juego en PC.
Hemos realizado estas impresiones gracias a un código para Epic Games Store facilitado por Koch Media.
